La directiva xeneize dio un paso más hacia la ansiada remodelación del estadio Alberto J. Armando.
Bombonera 360 fue el proyecto de ampliación de estadio elegido por Jorge Amor Ameal para la campaña previa a las elecciones de 2019. Y, aunque se dilató más de lo previsto, la directiva xeneize acaba de presentar un proyecto de rezonificación ante la Legislatura porteña para remodelar el estadio Alberto J. Armando y llevarlo a tener un aforo de 82.000 espectadores, más un techo. “Además de una utilización deportiva, como lo son los partidos de fútbol, se prevé la incorporación de otros usos comerciales y culturales, por lo que se tratará de un estadio moderno con múltiples usos que fomentará el desarrollo de la zona”, menciona la carta enviada desde el club a la Legislatura.
Este proyecto de ampliación contempla la idea original del estudio Delpini-Sulcic-Bes, autor de la construcción de La Bombonera, para conformar el anillo completo de forma simétrica. ¿Cómo? Derribando los palcos que dan a la calle Dr. del Valle Iberlucea y construyendo tres bandejas idénticas a las de las plateas con orientación oeste mediante la compra de las dos medias manzanas comprendidas entre las calles Aristóbulo del Valle, Antonio L. Solezzi y Brandsen (más del Valle Iberlucea). De esta forma el estadio pasaría a contar con un aforo de aproximadamente 82.000 personas, con chances de instalar un techo de cubierta liviana en el perímetro.
Voces importantes de gente que frecuenta los pasillos de Brandsen 805 le confiaron a este medio que la directiva azul y oro dialogó con varios miembros de la legislatura y son optimistas respecto a su aprobación puesto que el Master Plan no solamente apunta a agrandar la capacidad de la cancha sino a modificar la vida diaria del Barrio de la Boca, el club y la Ciudad de Buenos Aires. Comprenden que, con la construcción de una planta baja comercial habrá circulación y movimiento las 24 horas, lo que generará más espacios públicos y seguridad.
La otra importante novedad, en segundo plano, es que Boca aprovecharía esta remodelación para hacer lugar para un microestadio que albergaría miles de personas y en el que se desempeñarían diversas disciplinas amateurs y profesionales que militan en la actualidad. No estipularon plazos: “Lo ideal es que se apruebe lo antes posible”. Al mismo tiempo que desestimaron la chance de que alguien se oponga al avance de este proyecto por cuestiones políticas internas.
¿Cuáles son los pasos a seguir a partir de la presentación en la Legislatura porteña? El proyecto de ley que contemplará la compra de las dos manzanas aledañas a la Bombonera y separadas por la calle Dr. del Valle Iberlucea tiene que ser aprobado por los legisladores en estricto cumplimiento y sin infringir el Código Urbanístico que es el que determinará si es viable o no la obra. Boca necesitará iniciativa parlamentaria para seguir adelante, es decir que uno de los 60 legisladores tiene que hacer propio el proyecto para su presentación. Lo que cuestionan desde la oposición es que se acudió directamente a una instancia gubernamental sin haber tratado primero con los dueños de las viviendas y además apuntan que este proyecto de rezonificación sería en realidad uno de expropiación.
Desde que volvió a asumir como presidente de la institución, Ameal dividió a los dueños de las propiedades implicadas en un “80% de gente que quiere vender y un 20% que son especuladores”. Fuentes oficiales aseguraron que la adquisición de las casas linderas no será una dificultad para Boca. Tras ese tema no menor, el grupo de trabajo destinado a este menester deberá dedicarse a la reubicación de los dueños.
Según el informe hecho por el Colegio Profesional Inmobiliario, en esos dos bloques situados entre Del Valle Iberlucea y Antonio L. Zolezzi, Aristóbulo del Valle y Brandsen, hay un total de 129 propiedades (95 departamentos, 20 casas, 9 casas con local, 5 departamentos con local y un establecimiento más). El estudio de campo hecho por la anterior dirigencia de Boca indicó que el 63% estaba dispuesto a vender, el 22% en conflicto y el 15% no quería vender. Los informes de la actual Comisión Directiva determinaron que el 53% vendería, el 37% está dispuesto a negociar y el 10% no quiere vender o tiene problemas con el título de propiedad. Además, el Consejo Inmobiliario estimó que la totalidad de la compra de las propiedades costaría 19.827.949 dólares.
“A cada una de las personas que les vamos a comprar la vivienda se les dará lo que se merecen, sin que con esto se vaya todo a las nubes, sin que se transforme en un negocio inmobiliario”, había aclarado Mario Pergolini, una de las cabezas principales que tenía el Proyecto Bombonera 360 hasta su renuncia en marzo de 2021. Se había mencionado que Boca acudiría al Instituto de la Vivienda para que interviniera en el desalojo de la gente que usurpó propiedades en esa zona, pero a los dueños legítimos además de comprarles el terreno tendrán que reasignarles viviendas de similares características y ubicación a las que poseen actualmente.
Siempre y cuando reciba la aprobación, resulta impredecible calcular cuándo Boca tendrá vía libre para negociar con los dueños de los vecinos de la Bombonera por la venta de sus terrenos. En caso de recibir el pulgar arriba de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, entonces será tiempo de evaluar condiciones para financiar un proyecto multimillonario. “Será sustentable”, aseguraron desde las entrañas de Brandsen 805. Y es que, a prima facie, la dirigencia cree que con la venta anticipada de palcos y abonos en el nuevo sector que se construirá podrán cubrirse los costos de cada operación inmobiliaria con los vecinos, así como también la demolición de la zona de palcos y el levantamiento de la nueva estructura (incluidos materiales y mano de obra).
Sin necesidad de apelar a los billetes que aportaría el naming (recurso empleado por River y por ahora resistido en Boca) ni tampoco poniendo en riesgo la economía de la institución. Estiman que esos 25 mil lugares nuevos en el estadio serán los que harán realidad el sueño de contar con una Bombonera ampliada y en el mismo lugar de toda la vida, a diferencia de los planes de la oposición de hacer convivir dos estadios (idea propuesta por Andrés Ibarra, candidato impulsado por Mauricio Macri) o mudar la cancha a la Isla Demarchi (idea propuesta por Jorge Reale). El otro proyecto independiente es el Proyecto Esloveno Plus, lanzado por el socio Fabián Fiori.
Sin dudas que Ameal aspiraba a tener más avanzado el Proyecto 360 a esta altura, aunque lo cierto es que a su círculo íntimo le confiesa que la gran apuesta de su vida es ser reelecto en las urnas de diciembre próximo al lado de Riquelme, para en su segundo mandato finiquitar la obra que prometió y pasar a la posteridad como el presidente que agrandó la cancha de Boca Juniors.
Entre las obras más notorias del Master Plan presentado para Bombonera 360 en diciembre de 2019 sobresalen la pintura interior y exterior (buscando cambiar el color azul característico por el celeste desgastado que tenía), las refacciones en baños y accesos, la iluminación, modificación en el sistema de drenaje del campo de juego, reorganización de butacas en distintos sectores de la cancha que le dieron mayor capacidad al estadio hasta llegar la semana pasada a los 57.200, mientras que la idea es iniciar el 2024 con un total de 58.500 con algunos movimientos más.
LA CARTA DE BOCA A LA LEGISLATURA PORTEÑA:
Sr. Vicepresidente Primero:
Tengo el agrado de dirigirme a Ud. y por su intermedio al cuerpo legislativo que preside, a fin de poner en consideración de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el proyecto de Ley que tiene objeto posibilitar la ampliación del estadio del Club Atlético Boca Juniors.
En virtud de ello, el Proyecto de Ley propicia la modificación de la normativa urbanística prevista en el Equipamiento Especial N° 56 “Estadio y Complejo Deportivo del Club Atlético Boca Juniors” del Código Urbanístico que permitirá la ampliación del actual estadio “Alberto J. Armando” del Club Atlético Boca Juniors con una capacidad de 82.000 espectadores. Además de una utilización deportiva, como lo son los partidos de fútbol, se prevé la incorporación de otros usos comerciales y culturales, por lo que se tratará de un estadio moderno con múltiples usos que fomentará el desarrollo de la zona.
Por otra parte, se propone la localización de un microestadio, donde podrán desarrollarse actividades deportivas, culturales y comerciales como diferentes espectáculos que incentivarán mayores actividades en el sector.
Por último, se establece que el entorno del estadio sea destinado a espacios verdes parquizados de uso público y control de acceso como la instalación de áreas de servicios que beneficiarán la integración del nuevo estadio con el entorno urbano.
Por estas razones, solicito, por su intermedio y el Cuerpo Legislativo, la consideración y aprobación del proyecto de Ley que se acompaña.
Sin otro particular, saludo a usted muy atentamente.