La era Ricardo Caruso Lombardi en Belgrano se puso en marcha en la tarde de ayer en el predio Armando Pérez. Bajo un cielo color plomo, el entrenador se paró delante del plantel junto a sus colaboradores y rápidamente ordenó un ensayo futbolístico, como para ir viendo qué puede colocar el sábado a las 21 ante Mitre de Santiago del Estero en el Gigante. Entonces, después de los saludos, se colocó al lado del defensor Ignacio Vázquez, lo habló al oído y, tras una charla en confianza, le dijo al ex All Boys que lo iba a probar de lateral por derecha, dejando a Rodrigo Erramuspe como marcador central.
Así, el DT recién llegado empezó a gestionar. Avisó que firmó por un año pero… “Siempre dejo un espacio para una revisión a la mitad; qué se yo, por ahí los dirigentes no te quieren”. Y probó esta formación: Rigamonti; Vázquez, Erramuspe, Novillo y Quiroga; Sánchez, Rivero, Bernardello y Techera; Luján y Vegetti.
“Belgrano es un equipo enorme. Quiero que la gente tire a favor. Después, cuando termine el partido, si quiere que me putee, que diga lo que quiera, pero durante el partido les pido que alienten”, dijo Caruso, dejando claro que cuando le tocó ser visitante e el Gigante, siempre sintió la presión que ejerce el público.
Cuando se refirió al desafío, verborrágico y con humor, contestó: “Me gustó lo que me propusieron los dirigentes y aquí estoy. Lo único ahora es que tengo problemas en mi casa (se ríe). Mamma mía… mi señora… pero es por la chiquita”, en alusión a su hija menor.
Sobre el objetivo que se plantea para este proceso al frente del Pirata, el técnico dijo: “Vengo a sacar puntos. No me interesa nada más, cuando llego a un club vengo a sacar puntos y eso te va acomodando solito en la tabla. Espero que tengamos la suerte del mundo para este partido, porque eso nos va ayudar a sacar a los jugadores de este mal momento”.
Los dirigentes aseguraron que la llegada de Caruso se daba “por el momento que vive el equipo” y eso está claro. La idea de un golpe de efecto quedó marcada al momento de su contratación.
“Los dirigentes siempre apuestan a más. Ellos lo que tienen en la cabeza es estar arriba y, si no llegas a puntero, al menos estar entre los cuatro para pelear. En ningún momento se habló de esto específicamente, porque todavía quedan 17 fechas y es mucho. Pero sí están preocupados porque no le encuentran la vuelta al equipo. Pero creo que se le va encontrar la vuelta, no sé si ya, pero hoy vi indicios buenos en muchos lugares de la cancha”, agregó.
fuente: mundod