Luego de que peritos científicos comprobaran que el proyectil que mató al peón rural Luis Espinoza saliera del arma de oficial auxiliar José Morales, la Justicia cambiará la imputación de los ocho policías detenidos por el crimen. Así, la fiscalía del caso pedirá que se los enjuicie por un delito que puede suponer la pena máxima de prisión perpetua.
Según fuentes cercanas al caso, la fiscal Mónica García de Targa calificará la imputación contra los ocho policías como homicidio doblemente agravado, artículo 80 del Código Penal, inciso 6 e inciso 9.
“Se les cambiará la imputación en las próximas horas. Todos tendrán la misma. El inciso 6 detalla que se agrava la causa cuando hay una pluralidad de intervinientes o más de una persona en el hecho. El inciso 9 tipifica la conducta cuando los imputados fueren funcionarios públicos, en este caso funcionarios policiales”, explicó la abogada de la familia Espinoza, Cinthia Campos.
A su vez, el próximo jueves vencerá el período de prisión preventiva de los ocho policías y de los dos civiles detenidos por el crimen de Espinoza. La fiscal podrá solicitar una extensión de la misma, que se podría prolongar hasta la celebración de un juicio oral.
En tanto, la autopsia realizada sobre el cuerpo de Luis Espinoza permitió confirmar que el peón rural de 31 años murió en el mismo lugar donde fue baleado y apenas unos minutos después del ataque.
“Se pudo concluir que el proyectil que impactó en el cuerpo, lesionó la aorta torácica, produjo una herida afectando el lóbulo del pulmón izquierdo, generando una hemorragia masiva que evolucionó hacia el shock hipovolémico. Fue un traumatismo de tórax grave, producto del impacto de un proyectil de arma de fuego”, confirmó la abogada Campos.
Los peritos forenses comprobaron que el cuerpo de Espinoza pesaba unos 120 kilos y medía 1,83 metros al momento del análisis, por lo que se permite estimar la dificultad y la necesidad de varias personas para poder trasladar el cuerpo, hasta su aparición en un acantilado de Catamarca.
De los seis vehículos secuestrados en la causa, ya fueron peritados cinco. Hasta el momento, ninguno de ellos registró evidencia de sangre o muestras de ADN de la víctima. Sólo resta por analizar la camioneta Chevrolet Silverado roja, señalada por los dos polícias que se quebraron en su declaración como el vehículo utilizado para recorrer los más de 80 kilómetros y deshacerse del cuerpo en otra provincia.
Por ende, se estima que ese fue el único vehículo que se utilizó para realizar el operativo que condujo al crimen y para trasladar al fallecido Espinoza después del asesinato.
“La camioneta pertenece al primo del policía Esteban González Rojas, un aspirante a la fuerza policial llamado Álvaro González, de 19 años. Él también se encuentra detenido, pero su imputación será por el delito de encubrimiento”, afirmó la abogada Campos.
En las primeras horas del martes se les tomaron nuevas declaraciones al subcomisario de Monteagudo Rubén Montenegro, señalado como el ideólogo del intento de desaparición del cuerpo, y el propio oficial auxiliar José Morales. Al momento de la publicación de esta historia, se encontraba declarando el sargento primero René Ardiles.
En tanto, la jornada del martes finalizará con los testimonios del cabo José María Paz y del vigía de la comuna, Héctor Villavicencio y el miércoles se les tomará declaración a los policías Carlos Romano, el sargento Víctor Salinas, los cabos Miriam Villalba y Claudio Zelaya y el agente Esteban González Rojas.
A su vez, hoy se realizará una marcha hacia la Casa de Gobierno en la que se pedirá justicia por el asesinato de Luis Espinoza. La movilización fue organizada por la agrupación Familiares de Víctimas de Gatillo Fácil y participarán varios integrantes de la familia de Espinoza. Comenzará a las 17.
Luis Espinoza fue asesinado en El Melcho el viernes 15 de mayo, durante un operativo policial en el que se intentaba desarticular una carrera clandestina. Su cuerpo permaneció desaparecido durante una semana y fue hallado el 22 de mayo a 80 kilómetros de allí, justo en el límite entre las provincias de Tucumán y de Catamarca.