Ibar Pérez Corradi depositaba cheques,sacaba efectivo de la obra social bancaria y manejaba el negocio de la re-exportación de la efedrina a México durante la primera década de este siglo.
Primero fue indagado por el ex juez Norberto Oyaribe en la causa de la mafia de los medicamentos, después llegó un pedido de la DEA de EE.UU. para ser extraditado y en el 2012 el fiscal Juan Ignacio Bidone pidió su captura nacional e internacional.
Desde el 2012 hasta la fecha gozó de protección política K, de ayuda policial y de un sector de la SIDE, que le permitió seguir prófugo. Se trata de un ex empleado bancario que, en pocos años, pasó a ser un financista e influir en el negocio de la mafia de los medicamentos y de la efedrina.
Su captura fue gracias a la decisión de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, de encontrarlo y de lograr un acuerdo con Paraguay y al hecho que perdió la protección política que tuvo hasta el 2015.
Pérez Corradi guarda muchos secretos como ex jefe de Martín Lanatta y otros. En fuentes policiales afirman que podría saber quién era el funcionario en la época K al que se lo llamaba “La Morsa” y cobraba peajes para permitir la importación de efedrina desde la India y China para luego reexportarla a México.
Muchos de esos embarques de efedrina entraron al puerto de Buenos Aires cómo pólvora porque Pérez Corradi decía que tenía apoyo de sectores del RENAR, que en esa época bajo la órbita del ex jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
En diciembre del 2015, cuando asumió en el ministerio de Seguridad, Patricia Bullrich, encontró un informe con datos de Ibar Pérez Corradi en Paraguay que había dejado el ex secretario de Seguridad K Sergio Berni. En el 2012, el fiscal Bidone estuvo a punto de detenerlo en una countrie donde había ido a visitarlo su madre por el día del padre.
En febrero, luego de la recaptura de Martín Lanatta y los dos dos prófugos de la Triple Fuga, Bullrich intensificó la búsqueda de Pérez Corradi en Paraguay. Y un fiscal abrió una causa contra Berni para investigar por qué no se lo buscó antes. Hay pruebas de que vivió en Misiones con una identidad falsa y pasaba la frontera con tranqulidad.
En febrero fracasó un intento del gobierno de Macri, de la DEA y la policía paraguaya de detener a Pérez Corradi. Tenía el apoyo de un sector de la policía paraguaya y había soborno a policías con 100 mil dólares para que le den una DNI paraguayo falso. Hoy se quedó sin su último apoyo político.

Fuente: Clarín

Comments

Comentarios