En los juzgados laborales del edificio ubicado en Crisóstomo Álvarez 535, el uso del espacio ha cambiado para adaptarse a los tiempos que corren: casilleros que en su interior solo albergan plantas; salas de reunión de concepto abierto; amplios espacios de trabajo común con mobiliario funcional, una disposición des-jerarquizada que invita a la libre circulación de personas e ideas, y ningún rastro de papel.
Dentro del plan de modernización que impulsó la Corte para optimizar los mecanismos del trabajo cotidiano de los operadores jurídicos, la implementación del expediente digital tuvo un lugar privilegiado.
Rotundo cambio
En este sentido, es imprescindible destacar que la despapelización no se tradujo sólo en la modificación del soporte sobre el cual tramitan las causas, sino que, fundamentalmente, dio pie a un rotundo cambio en la cultura institucional de todo el Poder Judicial.
Las palabras del Dr. Rey, juez del trabajo de la IX° ejemplifican lo mencionado: “El Juzgado a mi cargo, integrado por jóvenes agentes, realizó distintas aproximaciones para facilitar el acceso a profesionales y partes. En primer lugar, incorporamos una “Caja fuerte digital” que permite acompañar documentación que, actualmente por cuestiones técnicas de peso o formato, no pueden ser subidas al SAE.
Videos y digitalización
Elaboramos también una serie de instructivos (videos tutoriales sobre temas como dónde encontrar la documentación original y ver el expediente digital ante la recepción de una demanda laboral, cómo contestar demanda adjuntando la documentación pertinente y cómo subir documentos en formatos de audio y video para reservar en esta “Caja”) a los que se accede desde un código QR mediante un link corto (https://uqr.to/rrg2).
Por último, estamos implementando horarios de atención a partes y profesionales en tiempo real mediante una videoconferencia abierta por la plataforma Zoom, donde una persona del Juzgado despejará dudas sobre el estado del expediente”. “Para nosotros –comentó el Dr Fernández Corona, juez del trabajo de la VIII°- fue un avance a pasos agigantados de procesos de gestión a los que pensábamos llegar en los próximos años y que conseguimos en pocos meses. La respuesta de la Dirección de Sistemas fue impecable desde todo punto de vista. Por comunicación que tengo con colegas de otras provincias sé que somos uno de los Poderes Judiciales que mejor se adaptó y que más rápido reaccionó”.
Herramientas tecnológicas
Si bien se pensó que la incorporación de herramientas tecnológicas a la gestión de los expedientes tendría lugar de forma paulatina para permitir la adaptación de los usuarios, la crisis sanitaria mundial (Covid-19) aceleró los tiempos, condensando años de trabajo en unas pocas semanas. Así, durante la vigencia de las medidas restrictivas dispuestas en todo el ámbito provincial, la colocación del Sistema de Administración de Expedientes (SAE), desarrollado por la Dirección de Sistemas, en los dispositivos personales de empleados y funcionarios lograron asegurar que no se interrumpiera la prestación del servicio de justicia en modalidad remota.
La queja es por la rapidez
“La queja, aunque parezca paradójico, es que se va demasiado rápido y a veces cuando quieren corregir algo ya se ha hecho el trámite correspondiente -reflexionó el Dr. Exler, juez del trabajo de la Xª-. Por ejemplo, se ha librado una cédula de traslado de demanda y a veces quieren rectificar o agregar algún tipo de documentación y ya las cédulas se han mandado. Eso va a requerir una adaptación al mismo ritmo, porque incluso en la era papel estaba incorporado en la mecánica de trabajo cierta demora que hoy por hoy no existe”.
Muchas más sentencias
En cuanto a las resoluciones dictadas durante el período, desde la Dirección de Estadísticas informan que entre el primer día de agosto del año 2020 y el 22 de abril de 2021 (fecha de la consulta), los juzgados del Trabajo de la VIIª a la XIª nominación, dictaron 146 sentencias definitivas que fueron tramitadas completamente en el marco de la implementación del expediente digital. Los tres tipos de sentencias definitivas que se presentaron con mayor frecuencia fueron las homologaciones de convenios (112 sentencias), las de fondo (17 sentencias) y los desistimientos (14 sentencias). Cabe recordar que se trata juzgados que fueron creados entre noviembre de 2019 y septiembre de 2020, y que pese al corto tiempo transcurrido han sido capaces de brindar una rápida solución para los justiciables que litigan en fuero.
“Como jueza –evaluó la Dra. González, a cargo de la XIª- participo de todas las audiencias que se celebran, porque estoy tratando de darle una impronta oral a la conciliación y pido a los letrados que ingresen al acto, que se conecten con sus clientes.
Todo se resuelve más rápido
Entonces, trato de transmitirle eso al trabajador porque en los juzgados digitales los conflictos se pueden resolver de una manera más acelerada. Yo llevo siete meses en la función y ya tengo sentencias de fondo, y en muchos trámites ya hay homologaciones de convenios, y ha sido muy positiva la experiencia virtual para las audiencias del Art. 42 (conciliación voluntaria); las del Art. 401 (juicios sumarísimos). A estas audiencias las he transformado muchas veces en audiencias de celebración de convenios, así que es muy positiva la experiencia”.
En igual sentido la Dra. Mena de Bulacio, jueza del Trabajo de la VII°, señaló que: “Si bien al principio, cuando teníamos las audiencias remotas era todo un tema lograr establecer la conexión con los profesionales, fue un aprendizaje para ellos también, que lleva su tiempo pero si uno pone la voluntad y no se niega a avanzar, sucede. Porque esto vino para quedarse”.