En julio pasado, el juez federal Ariel Lijo había citado a declaración indagatoria al ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el kirchnerismo, Oscar Parrilli, en una causa por encubrimiento debido a su actuación como jefe de los espías mientras el acusado de ser el autor intelectual del triple crimen de General Rodríguez, Ibar Pérez Corradi, estaba prófugo.
Lijo había puesto fecha de indagatoria para agosto pero se pospuso porque, según fuentes judiciales, había tareas de investigación pendientes. Una vez terminada esa fase de la investigación, Lijo determinó que Parrilli debe declarar el miércoles próximo. Así lo confirmaron fuentes de la investigación a Infobae.
Un día después debe declarar en indagatoria Emiliano Rodríguez, quien durante la gestión de Parrilli en la ex SIDE fue Director de Asuntos Judiciales de la AFI
La causa se abrió por una denuncia de Graciela Ocaña, quien advirtió que el gobierno kirchnerista contaba con información sobre el paradero de Pérez Corradi, pero que no fue brindada a los fiscales que lo buscaban.
El fiscal Juan Bidone de Mercedes -que tenía a su cargo la causa por el Tiple Crimen- y el fiscal federal Franco Picardi -que investiga el caso conocido como la “Mafia de los medicamentos”- habían dado intervención a la AFI para que buscara a Pérez Corradi (prófugo desde 2012 en ambos expedientes) de acuerdo con información que un testigo de identidad reservada había dado en agosto de 2015.
Según se pudo constatar en la causa judicial en la que Parrilli será indagado por encubrimiento, los dos fiscales le pidieron a la AFI en agosto de 2015 que buscaran a Pérez Corradi. Parrilli, por entonces jefe de los espías y director de la AFI, designó el 3 de septiembre de 2015 a los agentes encargados de la tarea de corroborar los dichos del testigo de identidad reservada.
Los agentes de Parrilli hicieron bien su trabajo y el 13 de noviembre de 2015 finalizaron el informe en el que no sólo habían hallado a Gladys Delgado –pareja de Pérez Corradi en Paraguay- sino que además habían identificado a una persona muy parecida al prófugo. Los agentes habían corroborado que los dichos del testigo de identidad reservada eran correctos.
Ni Parrilli ni Rodríguez elevaron ese informe a los fiscales. De esa forma -explican los investigadores judiciales- no cumplieron con su deber de funcionarios públicos y colaboraron para que Pérez Corradi continuara prófugo. El informe con las conclusiones que hubieran permitido detener a Pérez Corradi fue hallado por las nuevas autoridades de la AFI en el despacho de Rodríguez el 11 de enero pasado.
Pérez Corradi fue detenido recién en junio de este año, meses después del cambio de autoridades nacionales. En principio, el delito por el que debe declarar Parrilli encuadra en el de encubrimiento, aunque puede ampliarse la calificación y abarcar otras figuras penales.