El ex guardiacárcel Roberto Rejas es el principal sospechoso de la desaparición ocurrida en octubre de 2016. “He esperado mucho este momento”, aseguró la madre de la joven.
Este martes por la mañana se inició el juicio por la desaparición de Milagros Avellaneda y Benicio Coronel. Afuera de los Tribunales Penales, familiares y organizaciones de mujeres realizaron una concentración. “He esperado mucho este momento. Exijo que haya justicia para Milagros y Benicio, y que Roberto Rejas hable y diga la verdad”, sostuvo Amalia Ojeda, madre de la joven.
Milagros desapareció el 28 de octubre del 2016, cuando tenía 26 años, junto a su pequeño hijo. Como denuncia la familia de la joven, el ex guardiacárcel Rejas es el principal sospechoso. A través de mensajes con una amiga, se supo que Milagros estuvo con Rejas, su ex pareja, el día de su separación.
Rejas estuvo bajo prisión preventiva durante dos años y recuperó la libertad en 2019. Está imputado por homicidio agravado por alevosía (en el caso del niño) y por homicidio agravado por el vínculo, privación ilegítima de la libertad y violencia de género (por Milagros).
Las pericias en el interior de su vehículo permitieron el hallazgo de cabellos largos y la prueba de detección de rastros de sangre dio positivo. La familia de Rejas pertenece al área de criminalística de la Policía Federal y los días posteriores a la desaparición se realizaron maniobras de encubrimiento como lavar el auto en de Rejas o localizar las cámaras de seguridad. Como parte también del entramado de encubrimiento, en la Comisaría 11 se negaron a tomar la denuncia de la desaparición. Cuando la madre de Milagros pudo asentar la denuncia, Rejas buscó en Google cómo descomponer rápidamente un cadáver.
En la primera audiencia, Rejas respondió la indagatoria de la fiscal Giffoniello y fue desestimando la vinculación con Milagros y atacándola con algunas afirmaciones. Además ensayó justificaciones sobre el último día donde la joven avisó que se encontraba con él. Respecto a las maniobras de encubrimiento, el ex guardiacárcel sostuvo que “era obsesivo con la limpieza del auto” y que la prueba de luminol dio positivo porque a veces sus amigos tenía raspones por jugar al fútbol. También aseguró que su auto fue limpiado con químicos porque días antes un amigo suyo había vomitado.