Concentra las mayores expectativas entre toda la ayuda internacional. Los detalles.
A horas de que el equipo ruso de rescate se una a la búsqueda del submarino argentino ARA San Juan, la suma de todas las expectativas está en el vehículo sumergible no tripulado que llegará junto al avión Antonov AN-124. El Pantera Plus.
Ese aparato no tripulado pertenece a la llamada Flota Negra rusa. Es capaz de operar a una profundidad máxima de 1.000 metros y está dotado de un sonar que escanea el fondo del mar.
La ayuda incluye al capitán Serguéi Bashmakov, buzos de aguas profundas, a un médico y varios operadores del aparato teleguiado.
El mando naval ruso también dirigió al área de la búsqueda el barco oceanográfico Yantar, que sirve de nodriza.
El superavión arribará a suelo argentino esta noche. Y el Pantera Plus sería llevado a la zona de búsqueda a bordo del navío de la Armada argentina Islas Malvinas, rumbo a Comodoro Rivadavia.
Tal como los sistemas móviles de última generación, el Pantera Plus cuenta con sus propias fuentes de suministro eléctrico y, además de ser compatible con el Antonov An-124, uno de los más grandes del mundo, también puede ser operado por aviones de transporte militares Ilyushin Il-76.
Fue creado para la localización de embarcaciones que naufragaron o sufrieron averiadas y, una vez marcado su punto exacto en la profundidad, permitir el inicio de los trabajos de rescate.
Su sonar de barrido circular es capaz de descubrir en el agua objetos a distancias de hasta 300 metros y mandar imágenes al barco donde están los oficiales que lo controlan
Está equipado con cámaras del video en blanco y negro y a color, de alta sensibilidad luminosa, para el reconocimiento de lo encontrado y permite guardar las imágenes en la memoria que lleva incorporada.
El Pantera Plus tiene dos “brazos” mecánicos que pueden conectar mangueras de ventilación a los compartimentos, suministrar al interior del submarino o barco que naufragó distintos cargamentos dentro de unos estuches a través de los silos de torpedos, subir a la superficie cargas que no superen los 105 kilogramos.
Sus “brazos” también tienen un cortador de cables y una sierra circular para cortar estructuras de acero bajo el agua de un grosor de hasta 90 milímetros.