Una de las causas del fracaso de Concorde era el alto costo que representaba un vuelo entre Nueva York y Londres o París. Miles de dólares que se esfumaban en pocas horas. Era una nave de vanguardia, pero las líneas aéreas que contaban con estos jets –British Airways y Air France– no pudieron mantenerlos. En 2003, se discontinuaron.
Desarrollado por Boom Supersonic, esta aeronave podrá unir Nueva York con Londres en apenas 3 horas y 15 minutos. San Francisco con Tokyo en 5 horas y media y Sydney con Los Angeles en apenas 6.45 horas. ¿El costo del pasaje? Será de 2.500 dólares, según aseguran los desarrolladores. Los primeros vuelos de prueba están programados para 2017. Serán hechos con el prototipo bautizado XB-1 Supersonic Demonstrator.
Luego de las pruebas previstas para el año próximo, se espera que XB-1 pueda transportar hasta 44 pasajeros. La velocidad de este avión llegará a Mach 2.2, 0.2 más que el Concorde. Un avión de línea, en la actualidad llega a un Mach 0.85. La diferencia es asombrosa. Según los desarrolladores, las claves de esta nave están dadas por su “avanzado diseño aerodinámico, materiales livianos que soportan vuelos supersónicos“.
Originarios de Denver, Estados Unidos, esta startup promete comenzar con los vuelos regulares hacia 2020 y el público al que intentarán conquistar será el de altos ejecutivos que no puedan perder un segundo de su vida para hacer negocios. Quien está atento a este proyecto es Richard Branson, dueño de Virgin, quien quiere comprar las primeras diez unidades.