Por Pablo Batalla* para Diario Cuarto Poder | La comparación de los votos sacados en las PASO y los de las elecciones presidenciales del domingo señalan el traslado de un caudal importante del espacio del radical Ariel García al de Alberto Fernández.
Un caudal de votos del antimacrismo
El acto por la “Unión Nacional”, organizado por el referente radical Ariel García, antes de las elecciones presidenciales, en la que ese sector del radicalismo le brindaba su apoyo a la candidatura presidencial de Alberto Fernández, marcó la salida de los dirigentes Boina Blanca y sus aliados de Consenso Federal.
Los resultados de las elecciones del domingo señalan una pérdida de casi 30 mil votos a la lista que llevaba como candidatos presidenciales a Roberto Lavagna y Juan Manuel Urtubey, y como primer postulante para la Cámara de Diputados al ex legislador provincial Silvio Bellomio.
Esos votos fueron a engrosar la resistencia al “macrismo” y la construcción de la “unión nacional” junto al peronismo provincial.
Agradecimiento de Fernández
El propio presidente electo, en su condición de candidato aún, agradeció ese apoyo y llamó a todos los dirigentes que quieran unirse para superar las problemáticas actuales que afectan a un gran porcentaje de la población argentina, derivadas de las erráticas políticas aplicadas por el macrismo, en donde la inflación, la pobreza y el hambre, además de una fuerte desocupación y falta de reactivación productiva, llevaron a muchos argentinos a la desesperación.
En aquella oportunidad, tanto Juan Manzur como Osvaldo Jaldo se calzaron las boinas blancas lo que generó algunas críticas de los aliados macristas al espacio de García, quien respondió que quienes critican se la pasaron inflando globos amarillos en vez de discutir las malas decisiones de Macri, que perjudicaron a millones de argentinos.
Lo cierto es que nadie puede decir que García no fue crítico con Macri y duro con la condescendencia y el silencio de sus correligionarios.