El concejal Cristian Petersen presentó ante la comisión de Peticiones y Poderes del Concejo Deliberante, un proyecto para prohibir la venta de pirotecnia en San Miguel de Tucumán.
Petersen argumenta que los estruendos que superan los 70 decibeles (DB) afectan a las personas con Trastorno de Espectro Autista (TEA).
Si el proyecto es aprobado como ordenanza, podría haber multas de hasta $50.000 para aquellos que vendan pirotecnia en el ámbito de la Capital.
Estas mismas medidas ya se tratan en otros dos municipios del Gran San Miguel, Yerba Buena y Tafí Viejo. De hecho, en la Legislatura también se habla del tema y la prohibición podría afectar a todo el territorio tucumano.