Poco menos de un mes después de de que se produjera un escandaloso incidente en la puerta de un boliche, el patovica que lo protagonizó fue condenado a dos años de prisión condicional, mediante un juicio abreviado, por haber atacado con un golpe de puño a un estudiante universitario.
El incidente se desencadenó el 22 de septiembre, cuando la fiesta en el boliche Isabel de avenida Roca al 3000, ya llegaba a su fin. Alrededor de las 5, Gustavo Orlando Jiménez se encontraba junto a su novia y unos amigos en el local, participando de una fiesta ofrecida por el Centro de Estudiantes de la Facultad de Odontología.
Golpeado a latigazos
Por motivos que nunca fueron debidamente aclarados, el denunciante fue expulsado del boliche por los guardias de seguridad contratados por el dueño del local para realizar tareas de prevención.
Una vez en la acera, el joven fue atacado a latigazos y recibió un golpe de puño, por parte de dos de los patovicas. La novia del estudiante, que intentó protegerlo, también sufrió castigos físicos.
Poco después de que se conociera el hecho, que se viralizó en cuestión de horas, Jerónimo Ortiz se presentó ante las autoridades, llevando a que en principio se pensara que era quien había castigado a las dos víctimas con el látigo, aunque con el correr de los días se descubrió que él había sido el autor del golpe de puño en contra de Jiménez.
Juicio abreviado
El miércoles se celebró una audiencia para cerrar el proceso a través de un juicio abreviado. El auxiliar Benjamín Zavalía, siguiendo las instrucciones del fiscal Pedro Gallo, lo acusó del delito de lesiones graves agravado por el concurso premeditado de dos o más personas.
Tanto la defensa como la querella aceptaron los términos del acuerdo y, luego de que el imputado reconociera su culpabilidad, el juez Gonzalo Ortega le impuso la pena de dos años de cumplimiento condicional y ordenó que cumpliera ciertas normas de conducta. Al no haber planteos impugnativos, la sentencia quedó firme.
No termina ahí
Pese a la condena, la investigación del caso no terminó. Fuentes judiciales confirmaron que este acuerdo podría significar que los otros patovicas terminen presentándose en tribunales. Ortiz recibió la imputación más grave, mientras que sus compañeros podrían ser acusados de otros delitos que contemplan penas más leves.
Mientras esperan su presentación, los investigadores continúan tratando de identificarlos. El que está más comprometido es el que usó el látigo para castigar al estudiante oriundo de Termas de Río Hondo y a su novia.