Hace casi un año, el policía Facundo Lencina (24) esperaba a su pareja, mirando el celular, al costado de su moto. Dos ladrones lo increparon para robarle: “Dame todo porque te quemo”, le habrían dicho. El asalto duró apenas unos segundos. Adentro de la peluquería, donde trabajaba su novia, había tres clientas. En la calle, otras personas que iban y venían en una zona concurrida de la avenida América.
Mientras los ladrones escapaban, uno de ellos con un arma (se supo después que era una réplica) apuntando hacia Lencina, el Policía de civil –asegura– “dio la voz de alto”. Pasado ese aviso, que de momento sólo corresponde a la versión de la defensa, empezaron los tiros. “Mi cliente empezó a disparar porque, cuando dio la voz de alto, según indica el protocolo, el conductor de la moto gritó ’¡Es Policía, quemalo, quemalo!’ y no tenía manera de ver en ese momento, a esa hora, que se trataba de un arma de juguete”, dijo Augusto Avellaneda, abogado del policía.
Lencina disparó no una ni dos veces: tiró –confirmaron los peritajes– 14 veces en una zona concurrida, con personas alrededor y sin recibir, escuchar ni percibir, ni un sólo disparo de los asaltantes.
Los ladrones que lo habían asaltado murieron en el acto. Cayeron justo al lado de la moto y no llegaron ni a arrancar. Fueron identificados como José Alberto Gallardo (23) y Cristian Legname (29). Ambos tendrían antecedentes penales. Incluso, vecinos llegaron a indicarle a la Policía que eran conocidos en la zona por su actividad delictiva, según publicaron medios locales.
Enfrente estaba Lucas Delgado (21), que nada tenía que ver y que falleció camino al hospital Padilla con un disparo en el pecho.
El tribunal resolvió, por unanimidad, condenarlo a dos años y seis meses por la muerte de Lucas Fernando Delgado, hecho ocurrido el 13 de septiembre de 2023. Se fijó, además, la inhabilitación de portar armas por seis años.
En tanto, quedó absuelto de culpa y cargo por el delito de homicidio agravado por el uso de arma por haber actuado en legítima defensa, en perjuicio de Cristian Jesús Legname y Samuel Alberto Gallardo.
El MPF había pedido la pena de cuatro años y seis meses.
Al momento del hecho, Lucas Fernando Delgado, quien transitaba junto a sus hermanos por el lugar fue alcanzado por uno de los disparos efectuados por el policía falleciendo por un shock hipovolémico. Vía zoom -desde la muerte de su hijo viven en España-, padre y madre se expresaron.
“La familia está destruida. Los chicos no querían salir a la calle. Querían tener una vida normal y lamentablemente tuve que dejar el país porque tenían miedo. Hubo un exceso, no puedo entender la cantidad de disparos. Voy a pedir que se haga justicia por los tres, especialmente por mi hijo porque no lo voy a poder tener más”, dijo el papá. En tanto, su esposa agregó: “Estamos destruidos desde el día uno. Tomamos una decisión para rehacer nuestras vidas y para resguardar la seguridad de mis otros dos hijos que tengo vivos. Solo pido Justicia”.
fuente: Los Primeros