La Vicepresidenta se refirió por primera vez al proyecto de ley enviado por el Ejecutivo. Defendió el tratamiento parlamentario y le apuntó con sus críticas a Mauricio Macri. La iniciativa aún tiene final incierto en la Cámara de Diputados.
Mañana, el Frente de Todos, con el único acompañamiento del rionegrino Alberto Weretilneck, dará media sanción al proyecto la“Ley de Organización y Competencia de la Justicia Federal” enviado por el Poder Ejecutivo. Aunque Juntos por el Cambio se opone a su tratamiento, sus senadores participaron de los cinco plenarios de comisión con preguntas y debate pero sin introducir propuestas al texto oficial que tendrá un trámite complejo en la cámara de Diputados donde además de esa fuerza política, otros opositores ya se manifestaron en contra.
Puente de diálogo roto
En las últimas horas hubo dos infructuosos puentes de diálogo abiertos entre el oficialismo y la oposición que encaró el propio Alberto Fernández: un encuentro a solas en Olivos con el senador Martín Lousteau, que le pidió postergar el tratamiento y una conversación telefónica este lunes entre el presidente y el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta. Es que la misma reforma que avanza rápido en el Senado quedará frenada en Diputados.
Firmó la convocatoria
Ayer por la tarde, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner firmó la convocatoria a una sesión especial para el 27 a las 14 con cuatro temas en el orden del día. El primero de ellos será la autorización de la entrada de tropas extranjeras y la salida de fuerzas nacionales para participar del ejercicio del programa de ejercitaciones combinadas.
En segundo lugar se debatirán dos dictámenes que impulsan la anulación de las designaciones de vocales de los tribunales de enjuiciamiento del Ministerio Público Fiscal y el de la Defensa en representación del Senado, Mario Laporta y Juan Simoni, nombrados por la ex vicepresidenta Gabriela Michetti y a quienes el kirchnerismo reemplazará.
En cuarto lugar
En cuarto lugar figura el proyecto de reforma judicial. Aunque el mandato de Laporta vence en octubre, será reemplazado por César Grau quien podría actuar en procesos contra fiscales e incluso contra el propio procurador interino Eduardo Casal contra quien el oficialismo analiza iniciar juicio político y presiona para provocar su renuncia.
Hoy también, y por primera vez, Fernández de Kirchner se refirió en público a la reforma judicial que tuvo cinco sesiones de comisión en el Senado por donde pasaron 45 expositores, entre jueces, fiscales, constitucionalistas, abogados y representantes de ONG. Sufrió varias modificaciones, como la creación de más juzgados penales en las provincias y en la ciudad de Buenos Aires y se determinó que, en principio, el costo de su instrumentación alcanzaría los $ 1939 millones.
Unificación de fueros
Aunque no se cambiaron propuestas fundamentales para el kirchnerismo, que defendió la iniciativa en las comisiones, sí se descartó la unificación del fuero Civil y Comercial con el Contencioso Administrativo. En cambio se creará un tribunal de resolución de conflictos de competencia.
En un mensaje público desde su blog personal, Cristina Kirchner destacó la creación de nuevos juzgados y el cumplimiento del mandato de la reforma constitucional de 1994, que ordenaba la transferencia de la justicia ordinaria a la esfera de la Ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, ya desde el título con signos de pregunta,relativizó que se trate de una profunda reforma judicial.
Blanco sobre negro
En su entorno aclararon la cuestión: “Ella quiso poner blanco sobre negro y explicar que se trata de la creación de juzgados”. Sus intérpretes aseguraron a Infobae que no tuvo otra intención que bajar el tono a la polémica generada con la oposición y “poner en su lugar un debate contaminado por prejuicios”. Lo mismo quisieron entender en la Casa Rosada.
El proyecto, escribió la Vicepresidenta, “aborda cuestiones de competencia, que le da una mayor transparencia al ingreso y al sorteo de causas e introduce la perspectiva de género, se lo ha titulado erróneamente “Reforma Judicial”… y la verdad es que haciendo honor a la precisión semántica que deben tener nuestras palabras, en nuestro país en los últimos 20 años solamente ha habido dos reformas judiciales”.
La primera, en 2013
La primera de la dos, fue la suya en el año 2013 “que, votada por el Parlamento, fue dejada sin efecto por el propio Poder Judicial al afectar sus privilegios”. A la segunda la calificó como “de facto” y referencia a la realizada por el ex presidente Mauricio Macri. Una vez más lo acusó de tener como objetivo “perseguir y encarcelar opositores políticos y empresarios. A algunos de estos últimos para despojarlos de sus empresas y a otros para saldar cuestiones comerciales o hasta personales”.
No será la última
“Sinceramente”, continuó, “creo que el país todavía se debe una verdadera reforma judicial que no es la que vamos a debatir este jueves. Sin embargo, la primera actitud que debe tener la totalidad del sistema político argentino, cualquiera sea su postura ideológica y partidaria, es aceptar que cualquier diferencia, no sólo respecto de la organización del Poder Judicial o de la necesidad de su reforma, sino de cualquier otra cuestión sobre la que no haya acuerdo, tiene un solo lugar de discusión y resolución: el Congreso de la Nación”.
Tensión en el Congreso
Precisamente la tensión de las últimas semanas se sintió en el Congreso donde para frenar el avance de la reforma Juntos por el Cambio amenaza con no volver a participar de las sesiones en la Cámara de Diputados, la única de las dos donde el Frente de Todos no tiene mayoría propia ni quórum.
fuente: infobae