La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner protagonizó la inauguración de la ampliación del Hospital Regional de Río Gallegos.
Horas después de la creación de Unión por la Patria, y a nueve días del cierre de candidaturas, Cristina Fernández de Kirchner protagonizó un acto en Río Gallegos, capital de Santa Cruz. Su intervención se da luego de que el Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires emitiera un duro comunicado en el marco de la interna de la coalición oficialista.
Fue la primera reaparición masiva en público de la vicepresidenta luego del acto realizado el 25 de mayo. El marco fue la inauguración de la ampliación del Hospital Regional de Río Gallegos, que implicó una inversión de $63.000 millones. Estuvo acompañada por la gobernadora de la provincia de Santa Cruz, Alicia Kirchner, y el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis (al que Cristina Kirchner calificó como “un funcionario que sí funciona”).
“No nos tenemos que dejar manejar únicamente por los videographs que se plantean y con frases que se plantean. Se los dice alguien que está despojada de toda vanidad y ambición: he sido presidenta en dos oportunidades”, analizó.
En otra intervención, la vicepresidenta entendió que “la situación es compleja y es difícil, e implica responsabilidad y seriedad de todos los actores oficialistas y opositores. Creo que es necesario volver a ejercer ese amor por la patria o, si no les gusta esa palabra porque es muy grandilocuente, el hogar y la familia”. “Que haya diálogo entre todas las fuerzas políticas para abordar el terrible tema del endeudamiento con el FMI. Créanme que ese es hoy el principal problema que tiene la República Argentina“, anheló.
Cristina Kirchner criticó el endeudamiento con el FMI y una “postura única y nacional”
La vicepresidenta recomendó la serie audiovisual “Diciembre, 2001” y opinó: “Se ve a todo un gobierno pendientes al FMI si gira o no gira los fondos, algo que podría extrapolarse exactamente a lo que nos pasa ahora. Pensé que se había terminado eso”. Continuó con los comentarios culturales recordando su mención al libro “Diario de una temporada en el quinto piso” en un acto en el 2021: “Se lo mandé al presidente de regalo, espero que lo haya leído, pero me parece que no”.
También recordó su expresión sobre “los funcionarios que no funcionan”: “Los que no funcionaban manejaban la economía y la tarasca, este es el problema que tuvimos”. Refiriéndose a la renegociación del acuerdo, consideró que “hay que decirle a la sociedad la verdad. Si tenés que firmar porque tenés la 45′ en la cabeza, tenés que decirle que te hacen firmar. Porque después de todo ese préstamo no lo adquirió este gobierno, no es su responsabilidad. Lo sufre este gobierno y lo sufre la sociedad argentina”.
Al realizar comparaciones entre la economía del 2001 y la actualidad, argumentó que las similitudes ocurren “por el brutal endeudamiento y la llegada del FMI“. Refiriéndose a cómo el endeudamiento nacional repercutía en las provincias, expuso cómo la deuda de la provincia de Córdoba disminuyó de un pico del 2005 hasta un piso en el 2015, para volver a subir hasta el 2020.
Entonces, manifestó: “Esto es no discutir en serio sobre números y discutir únicamente con prejuicios e ideologías. Esto nos va a llevar a la ruina a los argentinos”. Sobre ello, argumentó que parte de la elección de Unión por la Patria tiene que ver con que “necesitamos imperiosamente un modelo que acabe con la economía bimonetaria y que además permita tener una postura única, uniforme, nacional y patriótica frente a los que nos exigen programas de ajustes”.
Posteriormente, criticó que el último préstamo con el FMI se utilizó para “sacar los dólares que habían traído para hacer un carry trade a una tasa exorbitante” y que “se produjo la fuga de dólares más vertiginosa y cuantiosa en apenas tres o cuatro meses de lo que se tenga memoria”. “Esto es lo que estamos viviendo los argentinos”, concluyó.
Para finalizar, sentenció: “es cierto que el país es uno solo, independientemente del partido que lo gobernó, pero el FMI también es uno solo. O ahora me van a hacer creer que Kristalina Georgieva no tiene nada que ver con Christine Lagarde. Responsabilidad compartida, en todo caso”.