-¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace tomando asistencia en voz alta acá en el bar? ¿Acaso se consiguió un laburito de preceptor?
–Jamás iría contra mis principios. Que trabajen aquellos que son más aptos que uno…
-¿Entonces qué está haciendo?
-Estoy por contarle un chismecito sobre un político ausente.
-¿Ausente de dónde?
-Ausente de todas las explicaciones que le pidieron desde el Concejo Deliberante en lo que va de su mandato.
-¿Usted se refiere a Camperito?
-¿Cómo hizo para sacarlo de una?
-Son pocos los intendentes que mantienen la regularidad en la incoherencia de sus actos.
-Pero, también pudo decir Roberto Sánchez o Germán Alfaro, sólo por dar algunos ejemplos….
-Diría que estoy con suerte, Eduard, así no le viene algo por tanta emoción.
-Está bien, Pequeño Saltamontes. Luego ensayaremos “La Grulla” y otras tomas…
-Tome la pastilla, Eduard. Ya me mezcló “Kung Fu” con “Karate Kid”…
-No le permito que me diga viejo, porque llevo con hidalguía este jopo gris.
-Está bien, no se me lo sulfure y cuente de una vez.
-Lo que pasa es que me contaron que Camperito no fue al Concejo Deliberante porque tendría que dar nombres de las empresas que extraen áridos.
-Ah, sí….
-Sipi.
-¿Y eso qué tiene?
-Que tendría que nombrar a algunos amigos e incluso personas muy cercanas.
-¿Parientes?
-No lo descarte, mi estimado…
-¡¡¡Usted es tremendo, Eduard!!!
–Se agradece el cumplido.
-Pero no me deje así. Ya que habló, largue nombres que me interesa la cuestión.
-¿Por qué?
-Necesito material para construir mi casa de campo.
-Y después se queja de Macri.
–Bueno, deje de dar más vueltas que perro pa´echarse y cuente…
-Primero tomaré mi segunda medida de wisky añejado que usted pagará con mucho gusto por la información.
-¡¡¡Ya me jodió de nuevo!!!