-¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace con ese frasco de Memorex? ¿Acaso me lo anda olvidadizo?
-No, mi estimado. Tengo una memoria de elefante y hasta le podría decir cuántas veces lo hice pagar la cuenta del bar…
-¡Nooo, por favor! ¡Esas son cosas que me asustan más que las novelas de Stephen King…!
-Bueno, no exagere tanto.
-Está bien, pero dígame quién es el desmemoriado.
-Me parece que José está llevando el estandarte de la desmemoria en estas elecciones.
-¿Alperovich?
-Sipi.
-¿Por qué dice eso?
-Porque en un spot publicitario dice que es importante garantizar la seguridad a los tucumanos.
-¿Y?
-Estuvo doce años en el gobierno y no pudo garantizarla y más, recuerdo que dijo que había perdido esa guerra.
-Tiene razón, y además se olvidó del paro policial que dejó a los tucumanos a merced de los delincuentes.
-Salvo sus concesionarios y propiedades.
-¡Exacto!
-Sí, parece que José acaba de bajar de un plato volador y no conoce nada de lo que pasó anteriormente.
-¿Lo habrán abducido los alienígenas?
-¡¡¡No sea zopenco!!! Era una ironía mía…
-Ah, está bien, pero cambiemos de tema.
-Ya que dijo Cambiemos, le cuento que después de las elecciones en Córdoba hay muchos de ese espacio que quieren hablar con Juan Manzur.
-¿En serio?
-Sipi.
-¿Por qué?
-Porque temen el efecto Llaryora.
-¿Usted se refiere al triunfo del peronismo en la Intendencia de Córdoba tras 46 años?
-Sipi.
-¿Usted cree que aquí ganaría Leito?
-Vaya preparando la camiseta del Decano.
-Es tremendo su análisis. ¿Qué le pasa al intendente Alfaro por estos días?
-Está más pálido que el fantasma Gasparín.
-Ja, ja, ja, usted no sirve, Eduard.
-Se agradece el elogio.
-Pero, ¿por qué toma un taco de Memorex?
-Quiero recordar que consumí a su cuenta…
-¡¡¡Ya me jodió de nuevo!!!