-¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace con ese balón de fútbol? ¿Acaso está organizando un picadito?
-No, mi estimado. Ya pasaron mis tiempos de gloria en el balompié…
-¿De qué jugaba, Eduard?
-Era un temible wing derecho.
-O sea que usted era un siete bien abierto…
-No se haga el vivo que le doy con esta pelota en la frente sin que tenga oportunidad de esquivar.
-Está bien, Eduard, no se me lo sulfure que le va a dar algo y cuente el chisme que tiene en mente.
-Sólo porque soy buena gente se lo contaré.
-Dele, deje de dar más vueltas que perro pa´ echarse y largue el chismecito que tiene en el buche.
-Esta pelota me la regaló un candidato que anda bien con los números.
-¿Quién?
-Un dirigente deportivo que quiere salir a la cancha electoral a ganar.
-No me diga que es Leito…
-Sipi.
-¿Le va bien en la campaña para intendente?
-Tan bien que le hizo recuperar la memoria y el amor por las obras a Germán Alfaro.
-¿En serio?
-Sipi.
-¿Y esos números le alcanzarán a Leito para alcanzar el ascenso?
-Con Atlético lo logró, si no lo hace en el mundillo político, por lo menos le hará caer la paletilla al actual intendente.
-¡Qué macana!
-¿Por qué?
-Porque ya no está la Carmela para curarlo.
-En eso tiene razón, pero hay otro indicador del crecimiento de Leito.
-¿Cuál?
-Sectores del alperovichismo le quieren echar tierra a su gestión como dirigente deportivo.
-¿En serio?
-Sipi.
-¿Por qué?
-Le quieren devolver gentilezas por no apoyar a José en su candidatura.
-Tremenda información Eduard.
-Invite un wikisito.
-Está bien. ¡Mozo, marche un Criadores!
-No se gaste, ya averigüé que tiene sólo Chivas Regal 18 años…
-¡¡¡Ya me jodió de nuevo!!!