De payasitos para vivir mejor en las peatonales y el resto sigue estando en el olvido

—¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace vestido de payasito? ¿Acaso consiguió un rebusque con las fiestas infantiles?

—Ya le dije muchas veces que soy un respetuoso de la gente que trabaja y más en el rubro del entretenimiento.

—¿Y entonces?

—Estoy disfrazado así para hablar de un afiche electoral del Loco Monedita.

—¿Se vistió de payaso?

—No hace falta, mi estimado.

—¿Qué hizo ahora?

—Los cráneos de sus publicistas hicieron una campaña en la que una payasita le entrega un globo a una niña en una de las calles remodeladas del centro, con el slogan: “Para vivir mejor”.

—¿Y eso?

—Váyase un poco más afuera en los barrios y fíjese si los vecinos viven mejor. Están en el olvido.

—Tiene razón.

—Váyase y vea la cantidad de semáforos que no funcionan en esta ciudad y no desde hace uno o dos días, desde hace más de una semana…

—¿Qué piensa usted de eso?

—Creo que el Loco Monedita se está preocupando por cómo deja el municipio al oficialismo provincial.

—¿Cómo? ¿Ya está perdido?

—Con la cantidad de jugadores que se le están yendo y lo irresoluto del espacio en materia de candidaturas y propuestas, ¿qué le parece?

—Está complicado entonces el Loco Monedita.

—Sipi. Solo parece estar preocupado por el arte.

—¿Por el arte?

—Sipi, por la promoción de la pintura y el dibujo.

—No entiendo por qué debería darle preeminencia a esos aspectos, pero dígame ¿qué pasará cuando vuelva Manzur en el oficialismo?

—Nada, la campaña seguirá con más fuerza. Ya se presentaron los candidatos de las listas oficiales y también de los acoples y la cosa seguirá así.

—Pero en Juntos por el Cambio aún no definen nada…

—Ese es un problema de nombres.

—¿Usted se refiere a quienes serán los candidatos y cuáles serán los cargos?

—Eso se llama “carguismo”, yo me refiero a un problema de nombres.

—¿Qué nombres?

—Me parece que, para empezar, tendrán que sacar el “Juntos” de su denominación.

—¡¡¡Usted no sirve, Eduard!!!

—Se agradece el cumplido.

—Se merece un porrón bien “frapé”.

—Muchas gracias, con estos calores no me vendría mal un tercer porrón a su cuenta.

—¡¡¡Ya me jodió de nuevo…!!!

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