—¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace vestido de tanguero y escuchando a todo volumen la canción “Volver” por Carlos Gardel? ¿Acaso se está por dedicar al rubro del 2X4?
—Más que eso, amigo, me gustaría andar en una 4×4…
—No llore miseria, Eduard, que ya me hace acordar a la canción “Cambalache”, en la parte que dice: “el que no llora no mama…”
—Uno que yo sé, hoy tomó Avivol B12, pero no se pase de pícaro que no hablaremos de los rumores de regreso…
—¿Usted se refiere a lo que se hablaba sobre el regreso de Juan?
—Sipi.
—¿Y regresa?
—Él mismo lo desmintió, pero la versión existió y varios medios la publicaron.
—¿Y eso a qué se debe?
—Para mí, es una estrategia para que le den más participación en las definiciones del Gobierno Nacional.
—¿Cómo? ¿No participa en todo?
—Mire, no es fácil jugar en la primera división. Además, que no conviene a sus proyecciones.
—¿Qué proyecciones?
—Las de ser un potencial integrante de la fórmula.
—¿Y Alberto?
—También tiene que tratar de estar en la fórmula.
—Viene bastante golpeado…
—Pero en política todo puede ser posible.
—En eso tiene toda la razón.
—Y también en que el regreso de Juan marcaría un retroceso en el sistema educativo.
—¿Qué retroceso?
—El Gobernador volvería a hablar mal y abusar del término “creaturitas”.
—Pero allá él habla bien…
—Son las luces de la gran ciudad.
—¡¡¡Usted no sirve, Eduard…!!!
—Usted no se queda atrás, mi estimado amigo.
—Le invito una picadita.
—Sipi, pero antes déjeme mandarle un saludo al jefe que mañana está de alta por covid.
—¡No sea chupamedias!
—La verdad que quiero chupar un vinito a su cuenta. Pediré un malbec.
—¡¡¡Ya me jodió de nuevo…!!!