El ejército israelí amplió su operación de ataque terrestre a “todas las áreas” de la Franja de Gaza tras la reanudación de los combates el viernes. Decenas de tanques entraron en el sur de Gaza pese a la presencia de cientos de miles de civiles. El mundo pide que pare este genocidio contra el pueblo palestino.
Por la mañana, publicó en las redes sociales una nueva orden para que la gente evacue unas 20 zonas del enclave palestino en medio de advertencias de grupos humanitarios de que los habitantes de Gaza se están quedando sin lugares donde huir.
Altos funcionarios estadounidenses, como la vicepresidenta Kamala Harris, reiteraron su opinión de que Israel tenía derecho a defenderse, pero agregaron que sus soldados deben proteger a los civiles.
Un asesor del Primer Ministro de Israel le dijo a la BBC que su país estaba haciendo el “máximo esfuerzo” para evitar víctimas civiles.
Israel lanzó una feroz guerra contra Hamas en Gaza, luego de que el grupo radical palestino atacara Israel el 7 de octubre matando a 1.200 personas y tomando como rehenes a unas 240 más.
Israel declaró la guerra a Hamas y prometió “aniquilar” a Hamas, que gobierna en el enclave palestino desde 2007.
Israel multiplica los bombardeos en el sur
Las fuerzas israelíes, que iniciaron una ofensiva terrestre el 27 de octubre en el norte del enclave palestino, multiplicaron los bombardeos en el sur, desde que se reanudaron los combates el 1 de diciembre tras siete días de tregua. El ejército afirmó que iba a extender sus operaciones “en el conjunto de la Franja de Gaza”.
“El ejército opera en todas partes donde Hamas tiene bastiones”, declaró el domingo por la noche su portavoz, Daniel Hagari.
Decenas de tanques, vehículos de transporte de tropas y topadoras israelíes entraron en el sur del pequeño territorio, a la altura de la ciudad de Khan Yunis, indicaron este lunes a AFP varios testigos.
Amin Abu Hola, de 59 años, explicó que estos vehículos militares habían penetrado ya unos dos kilómetros hasta el pueblo de Al Qarara, al noreste de Khan Yunis. “Los tanques están ya en la carretera de Salaheddin”, que cruza la Franja de norte a sur, añadió por su lado Moaz Mohammed, de 34 años.
Un bombardeo en la entrada del hospital Kamal Adwan, situado en el norte de Gaza, dejó en la madrugada varios muertos, según la agencia palestina Wafa. El gobierno de Hamas acusó al ejército israelí de una “grave violación” del derecho internacional. El ejército no confirmó esta información.
Israel acusa al grupo islamista palestino, también catalogado de organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, de haber instalado infraestructuras bajo los hospitales de la Franja y de utilizar a los civiles como escudos humanos.
El ejército israelí anunció el lunes que tres soldados murieron el domingo en el norte del territorio, llevando a 75 el número de militares fallecidos desde el inicio de la ofensiva terrestre.
Tregua e intercambio de rehenes y presos
Bajo una tregua mediada por Qatar, con apoyo de Egipto y Estados Unidos, 80 rehenes israelíes fueron liberados a cambio de la salida de 240 presos palestinos.
Más de una veintena adicional de rehenes también fue liberada de Gaza, en su mayoría tailandeses radicados en Israel.
Pero la tregua se rompió el viernes, cuando -según Israel- Hamas lanzó un cohete desde Gaza. Las negociaciones para extender el alto el fuego y liberar mas rehenes no pudieron reanudarse.
En el sur del territorio, los bombardeos israelíes se centraron en los últimos días en Khan Yunis y sus alrededores, donde cada día el ejército advierte de un “terrible ataque inminente” y ordena evacuar a la población.
Desde el inicio de la guerra, cientos de miles de habitantes de la Franja han huido de sus casas y se hacinan en el sur.
Israel aseguró que no está tratando de obligar a los civiles de Gaza a abandonar definitivamente sus casas, aunque reconoció que las condiciones son “duras”.
“Hemos pedido a los civiles que evacuen la zona de combates, y hemos designado una zona humanitaria dentro de la Franja de Gaza”, dijo Jonathan Conricus, uno de los portavoces del ejército israelí refiriéndose a una estrecha banda costera dentro del enclave, llamada Al Mawasi.
Los hospitales, que en el norte están casi todos fuera de servicio, en el sur están desbordados de heridos, sin electricidad y con poquísimo carburante en las reservas.
“Nos faltan las palabras para describir los horrores que azotan a los niños aquí”, dijo el domingo James Elder, un portavoz de Unicef presente en el hospital Nasser de Khan Yunis, el mayor del sur de Gaza.
“Veo llegar a niños en masa entre las víctimas”, afirmó.
El ejército israelí informó que había efectuado “unos 10.000 bombardeos” en Gaza desde el inicio de la guerra.
Estos ataques destruyeron o dañaron más de la mitad de los edificios, según la ONU, cuyo secretario general, Antonio Guterres, habló de “una catástrofe humanitaria mundial”.
Las necesidades son inmensas en el territorio, sometido a un asedio total desde el 9 de octubre, donde 1,8 millones de personas, de un total de 2,4 millones, se vieron forzadas a desplazarse por la guerra, según la ONU.
Excepto los siete días de tregua que permitieron la entrada desde Egipto de cientos de camiones de ayuda humanitaria, el paso fronterizo de Rafah está abierto parcialmente.
En paralelo, el ejército israelí lanzó en la madrugada del lunes operaciones en diferentes sectores de Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel desde 1967, sobre todo en Yenín, según la agencia Wafa.
Estados Unidos, que brinda a Israel miles de millones de dólares anuales en ayuda militar, ha intensificado los llamados a proteger a los civiles en Gaza.
“Demasiados palestinos inocentes han muerto”, declaró la vicepresidenta Kamala Harris en la cumbre climática COP28 en Dubái.
Alemania también urgió a Israel a garantizar una protección “real” a los cientos de miles de civiles en el enclave.
Entre temores a una conflagración regional, un destructor estadounidense derribó varios drones sobre el mar Rojo mientras asistía a buques comerciales que habían sido blanco de ataques desde Yemen.
Rebeldes hutíes en Yemen, apoyados por Irán, dijeron que atacaron a dos de los barcos. También lanzaron una serie de drones y misiles contra Israel las últimas semanas.
fuente: clarin