El tandilense resolvió rápido la semifinal contra el alemán por 6-4 y 6-2. En la final, enfrentará al sudafricano Kevin Anderson e intentará arrebatarle el octavo lugar del escalafón mundial.
Más rápido de lo previsto. Así Juan Martín Del Potro se sacó de encima al alemán Alexander Zverev, que había quedado como el máximo favorito en el ATP 500 de Acapulco tras el abandono del español Rafael Nadal. Sin embargo, el tandilense se las arregló para no sufrir ante el ascendente tenista de 20 años.
A priori, la semifinal no se presentaba sencilla para Delpo, que llegaba de dejar en el camino al experimentado español David Ferrer y al poderoso austríaco Dominic Thiem. Pero al igual que en su partido de cuartos de final, logró quebrar rápido a una de las mejores apariciones del circuito.
Fue en el tercer game, cuando el tandilense se adelantó con un decisivo 40-0 y se perfiló de la mejor manera en el primer set. Mientras Zverev no paraba de fallar, un brusco movimiento lo obligó a pedir asistencia médica cuando estaba 3-1 abajo y sacaba 40 iguales.
El momento de incertidumbre no pasó a mayores. Una venda en su rodilla izquierda solucionó el problema, siguió en cancha y recuperó, en parte, su juego. Porque si bien defendió su servicio, del otro lado encontró un Del Potro que no regaló nada. Entonces, la Torre se llevó la primera manga por 6-4.
Otra vez, Delpo quebró en el tercer game (0-40) aprovechando el fastidio que Zverev que terminó rompiendo su raqueta por la impotencia de la cantidad de errores no forzados (23 contra 13 de su rival) que le terminaron costando caro. Estuvo poco eficaz desde el fondo de la cancha y previsible a la hora de buscar variantes en su juego.
Fino en su servicio y rápido a la hora de resolver, el noveno del escalafón mundial le tiró toda su experiencia al alemán y quebró nuevamente en el séptimo game. La historia estaba juzgada. Solo quedaba tiempo para ver cómo el argentino cerraba el partido con su saque. El 6-4 y 6-2 final dejó bien parado a Delpo de cara a la finalísima en la medianoche del domingo.
“Estoy cansado, pero haré el último esfuerzo; he jugado contra rivales exigentes y soy un afortunado por estar en la final”, soltó el verdugo de Zverev.
La motivación será doble para Delpo. Por un lado, buscará levantar su primer título en el año, que se le negó a comienzos de la temporada cuando perdió la final de Auckland contra el español Roberto Bautista Agut. ¿El otro aliciente? Si derrota a Kevin Anderson lo superará en el ranking. El sudafricano ocupa la octava posición, con 30 puntos más que el argentino.
El ganador del torneo mexicano sumará 500 unidades, contra las 300 del otro finalista. Entonces, una victoria dejará a Delpo por encima del sudafricano, y a apenas 35 puntos del séptimo lugar que ocupa el belga David Goffin.
Kevin Anderson, el rival de Delpo en la final de Acapulco. (AFP)
Hay que con qué ilusionarse en el duelo de gigantes. Del Potro (1,98m) venció a Anderson (2,03) en sus seis enfrentamientos previos. La última vez que se vieron las caras fue en febrero del año pasado en la primera ronda del torneo de Delray, Florida.
Pero ojo: Anderson, que venció en la semi al estadounidense Jared Donaldson por 6-3, 4-6, 6-3, llega en alza a la definición. Será su tercera final consecutiva: la semana pasada se coronó en Nueva York y, a principios de año, perdió en India contra Giles Simon. Ahora, intentará levantar su quinto título y el segundo de 2018.
La Torre de Tandil, en tanto, buscará ganar el 21º trofeo de su carrera, el primero desde su triunfo en Estocolmo en octubre del año pasado.