El argentino venció al suizo en cuatro sets y se metió en semifinales del Grand Slam que ganó en 2009. Lo espera Rafael Nadal.
Juan Martín Del Potro lo ha hecho de nuevo. Superó en cuartos de final al suizo Roger Federer 7-5, 3-6, 7-6 (10-8) y 6-4 y se metió en las semifinales del US Open, el último Grand Slam del año. El viernes lo espera Rafael Nadal.
Juan Martin del Potro celebra tras el enorme triunfo ante Roger Federer. AFP
El partido arrancó sin fisuras de ninguno de los dos. Sólidos desde el saque y con el drive listo para completar el combo y cerrar los puntos. Para Del Potro, se sabe, la derecha es la carta fundamental y muchas veces la única para lograr imponerse. El argentino apostaba a esos latigazos cruzados para abrir al suizo y sacarlo de eje. Pero enfrente tenía a un manual de tenis.
El único hueco apareció en el undécimo game. Y fue de la manera menos pensada: una doble falta de Federer le dio a Delpo la primera chance de quiebre del partido, que aprovechó con un tiro de gracia.
El suizo ganó la red con un golpe de aproximación paralelo, pero el tandilense contraatacó perfecto con su drive cruzado. Un martillo, tal como lo había calificado su rival. Luego confirmó el quiebre con su saque (terminó la primera manga con 84% de efectividad en el primer servicio) y se llevó el set 7-5.
En el segundo set, Federer salió decidido a darle a Del Potro de su propia medicina. Aceleró su revés. Y aprovechó que el argentino perdió eficacia en el primer servicio. El suizo quebró (con 0-40) para ponerse 3-1 y empezar a imponer condiciones.
El revés plano de Delpo no lastimaba y cuando intentaba variar la velocidad y pegarle con slice se encontraba con una devolución contundente. El segundo set fue todo del suizo, que lo cerró 6-3, doblando en winners al tandilense (19 a 8).
El tercero arrancó de la mejor manera para el argentino. Otra vez una doble falta de Federer en el momento menos indicado sirvió para quebrar y Delpo enseguida inclinó el parcial para su lado y se fue al primer descanso 3-0.
El trámite favorecía al argentino: puntos cortos, movimientos mecanizados y el tiempo suficiente para poder invertirse de derecha para usar lo menos posible el revés. Del lado de enfrente, Federer falló un par de derechas cruzadas sencillas y por momentos lucía estático. Pero el tandilense no fue punzante cuando tuvo una nueva chance de quiebre y le dio una vida más a Federer en el set que se estiró hasta el tie break.
Por ese entonces el tenis que se desplegaba en Nueva York era de altísimo nivel. El cierre del tercero fue el mejor recorte. Delpo salvó cuatro set points, dos con su servicio y dos con el de Federer (una devolución fenomenal sobre la línea de fondo), y en la primera chance que tuvo se llevó el parcial 7-6. Apretó el puño y se animó a soñar.
Juan Martin del Potro festeja tras conseguir el primer set ante Roger Federer. (AP)
El cuarto continuó mostrando una escena similar. Los dos jugadores buscaron hacerse fuertes con sus respectivos saques, pero el control psicológico parecía en manos del bonaerense. Así, el europeo incurrió otra vez en la impaciencia y quedó 15-40, con su saque. Logró reaccionar, aunque falló una volea fácil para sufrir un ‘break point’, que fue aprovechado por Del Potro, con una perfecta derecha cruzada (3-2).
El revés del tandilense se mantenía imperturbable, lo mismo que su saque para adelantarse 4-2 ante un Federer que, a veces, perdía el eje. Del Potro continuó haciendo daño con su derecha desde el fondo de la cancha. El argentino halló una devolución formidable para situarse 0-30 a favor y marcador 5-3. Pero Federer estiró la definición, con cuatro saques precisos.
Pero al siguiente game, el tandilense mostró temple y autoridad para resolver el encuentro, clasificándose semifinalista. Como para soñar otra vez como hace ocho años.
Delpo, de 28 años, y Roger, de 36, se enfrentaron en 22 ocasiones, con 16 triunfos para el suizo y ahora seis para el argentino. En 10 oportunidades llegaron hasta el quinto set, como para marcar la paridad en el trámite. El único duelo de este año fue para el ex número uno del mundo, quien se impuso en la tercera ronda del Masters 1000 de Miami, que terminó ganando. Aunque el tandilense guarda un recuerdo imborrable y justamente en el US Open: en 2009 derrotó en la final a Federer para gritar campeón y conseguir el único Grand Slam de su carrera.
Del Potro, 28° en el ranking mundial, había accedido a esta instancia tras un partido que quedará grabado en su historia al superar al austríaco Dominic Thiem (8°) luego de perder los dos primeros sets. Cuando parecía que se despedía del certamen logró reaccionar, fue de menor a mayor, y finalizó con un heroico 1-6, 2-6, 6-1, 7-6 (7-1) y 6-4 después de levantar dos match points.
Antes, había superado al suizo Henri Laaksonen (94°) y a los españoles Adrián Menéndez Maceiras (148°) y Roberto Bautista Agut (13°).