Las aerolíneas tendrán libertad para fijar tarifas para vuelos de cabotaje, ida y vuelta, comprados con una anticipación no menor a 30 días.
El miércoles entrarán en vigencia las tarifas aéreas “low cost”, a partir de lo cual las aerolíneas tendrán libertad absoluta para cobrar lo que decidan por los tickets de vuelos de cabotaje. Hasta hoy, tenían liberado el techo y desde mañana podrán cobrar lo que quieran hacia abajo: si deciden vender asientos a precio de remate, ya no habrá más restricciones, excepto en lo referido a la anticipación con que debe ser comprado el pasaje y que éste sea siempre de ida y vuelta.
El texto de la normativa dice: “Autorízase a los explotadores de servicios regulares de transporte aéreo interno de pasajeros, a partir de las CERO (0) hora del día siguiente a la publicación de la presente resolución en el Boletín Oficial de la República Argentina, a aplicar tarifas inferiores a las tarifas de referencia vigentes para las ventas de pasajes aéreos de ida y vuelta que se realicen con más de TREINTA (30) días de anticipación”.
Esta norma, que es resistida por los gremios aeronáuticos y que -en voz baja- tampoco les gusta nada a las principales aerolíneas del sector, le otorgará una herramienta de marketing a las aerolíneas “low cost” como Flybondi, que ya opera en el país, y a otras que ya tienen autorización del Gobierno pero aún no comenzaron a volar, como Norwegian y Jet Smart.