El servicio de Hemato Oncología del hospital de Niños busca generar conciencia.
El servicio de Hemato Oncología del hospital de Niños se suma a la fecha de conmemoración instituida el 15 de febrero de cada año, con el objetivo de sensibilizar y generar conciencia en la comunidad acerca de la importancia de los desafíos a los que se enfrentan los niños, adolescentes y sus familias por esta patología de alta prevalencia mundial.
La jefa del servicio de Hemato Oncología, doctora Patricia Luna, contó que el hospital cuenta con dos áreas destinadas para este abordaje, una es el servicio de Hemato Oncología propiamente dicho y la otra es la Sala 12 de internación de pacientes inmunodeprimidos.
“Generalmente los niños ingresan por el servicio, son estudiados y una vez diagnosticados se los interna para que reciban quimioterapia o se les indica tratamiento ambulatorio en hospital de día”, dijo.
Las consultas en su mayoría tienen lugar por medio de derivación o interconsulta de otros hospitales o de consultorio externo tanto de capital, como del interior y provincias vecinas o para continuidad de tratamiento iniciado en instituciones de Buenos Aires como el hospital Garrahan.
“El cáncer más frecuente en niños que recibimos es la leucemia, en segundo lugar tienen presencia los linfomas y luego los tumores del sistema nervioso central, que es el primer tipo de cáncer infantil a nivel mundial. Las cifras calculadas estiman unos 50 casos nuevos por año. A partir de diciembre recibimos 15 nuevos casos que se suman a los pacientes que ya tenemos en tratamiento”, explicó Luna.
El servicio de Hemato Oncología cuenta con médicos clínicos y oncólogos, psicóloga, bioquímicas, secretaria y una técnica. Además la Fundación Flexer colabora en el área de asistencia social de los pacientes. El mismo atiende todos los días a partir de las 7:30 horas.
La jefa de Sala 12, doctora Consuelo Núñez, comentó que el espacio está destinado a la internación de los niños que tienen un diagnóstico de enfermedad hemato-oncológica. Respecto a la fecha de conmemoración, la profesional destacó su importancia al momento de generar verdadera conciencia acerca de la enfermedad y que todos los niños puedan tener acceso a tratamiento precoz y oportuno.
“La internación donde el niño recibe un tratamiento de más de 24 horas, es en sala y contempla el tratamiento de las complicaciones aparejadas a la enfermedad del niño que se encuentra inmunocomprometido, las principales son las infectológicas. La población que recibe la sala son pacientes desde los primeros meses de edad hasta los 18 años y cuenta con habitaciones individuales que cumplen todas las normas de bioseguridad tanto en la comida, como en la limpieza y el uso de filtros de aire hepa”, explicó Núnez.
Valeria Nieva, de 34 años, tiene a su hija de 15 internada en el hospital por leucemia mieloide: “Fue muy complicado al principio, uno nunca espera pasar por esta situación pero más allá de todo, al ingresar aquí uno siente la contención que te da fuerzas para seguir adelante. Tanto la oncóloga, como la médica clínica, la psicóloga y el grupo completo, más allá de todo el dolor y sufrimiento que uno atraviesa durante este proceso, generan un entorno que nos ayuda a tomar la situación con más calma y lucharla como lo venimos haciendo. Uno como padre no espera que sus hijos pasen por un proceso tan duro, pero es bueno saber que se puede salir adelante, hay que ponerle garra y contener a tu hijo”, reflexionó.