El proyecto que establece la implementación de la boleta única electrónica en todo el país a partir de las elecciones de 2017 y la paridad de género en las listas.
La Cámara de Diputados continuaba esta noche el debate del proyecto de Reforma Electoral que establece la implementación de la boleta única electrónica en todo el país a partir de las elecciones de 2017 y la paridad de género en las listas, con una extensa lista de oradores que hace prever la votación promediando la madrugada.
Tras seis horas de debate, mientras en el recinto se realizaban los discursos, diputados de diferentes bancadas intentaban llegar a un acuerdo sobre un capítulo del proyecto que aún presenta final abierto: el que establece que los votantes sólo podrán participar de una interna y no en varias y por categoría.
Si bien el dictamen de mayoría motorizado por el macrismo establece las denominadas ‘primarias cerradas’; las disidencias a ese texto realizadas por sus socios de Cambiemos -la UCR y la Coalición Cívica- y las posturas contrarias del massismo y del bloque Justicialista dejan en evidencia la falta de consenso sobre el tema.
Hasta la hora de la votación en general, prevista para las 5, los representantes de los diferentes bloques seguirán discutiendo el tema para intentar llegar a un acuerdo; negociación a la que el oficialismo ya accedió a una alternativa intermedia que solicitaban los partidos provinciales para resolver la falta de candidatos presidenciales.
Para aprobar éste artículo, así con el resto y el texto en general, es necesaria una mayoría especial de 129 votos afirmativos, la mitad más uno de los 257 integrantes totales de la Cámara por tratarse de un proyecto electoral, según lo establecido por la Constitución Nacional.
Ese número sería el que macrismo aún no tiene asegurado y de allí el final abierto que se dirimirá durante la votación en particular, prevista para las primeras horas de la mañana.
Durante el debate del proyecto, el presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales, Pablo Tonelli (PRO-Cambiemos) afirmó que el sistema actual “está agotado” y que el proyecto de reforma electoral impulsado por el gobierno nacional que se debate en la cámara baja busca dotar “de mayores garantías y seguridades” al que está en vigencia.
Entre otras cuestiones, el diputado del PRO, que manifestó la disposición del oficialismo de introducir más cambios al texto original en la votación en particular, destacó que la iniciativa contempla la paridad total en las listas “de manera que en todas las listas haya igual número de mujeres y varones” y puso de relieve que, a través del proyecto, se creará una comisión bicameral de seguimiento del sistema.
Por el radicalismo, Carla Carrizo, señaló: “Esta es una reforma política, innova, y regula a los partidos, a los candidatos y la relación Nación-provincias; por eso apoyamos la paridad porque es necesario, y porque el cupo constituyó un techo”.
Desde la oposición, los diputados del Frente para la Victoria-PJ, Diana Conti y Juan Pedrini, manifestaron un “rechazo absoluto” al dictamen del proyecto sobre reforma electoral, aunque destacaron que esa bancada “respalda la paridad de género”.
La legisladora kirchnerista destacó que se trata de un sistema que está “en retroceso en el mundo”, al sostener que “muy pocos países lo utilizan”; esto es, la boleta electrónica.
Por su parte, Pedrini, que presentó un dictamen diferenciado del resto de la bancada, dijo: “El debate no es si boleta electrónica sí o boleta electrónica no; lo que queremos es la participación del ciudadano”.
“Lo que queremos es control ciudadano de las elecciones. Que ninguna empresa haga lo que puede hacer el pueblo”, remarcó Pedrini, que impulsa el dictamen que cuenta con el visto bueno del presidente del PJ, José Luis Gioja, y de la mayoría del bloque de senadores del FPV-PJ.
Desde el massismo, la diputada Carla Pitiot señaló que la reforma “servirá para ampliar derechos y mejorar las reglas del juego”.
“La introducción de la tecnología dará mayor agilidad al proceso electoral así como también reducirá los costos, pero fundamentalmente transparentará el proceso”, agregó la legisladora del Frente Renovador.
Por el bloque Justicialista, Pablo Kosiner salió al cruce de quienes cuestionan el sistema de boleta electrónica, al afirmar que “pensar que se hacen estas reformas políticas para robar o hacer fraude es menospreciar la voluntad del pueblo argentino”.
“El primer ‘chip’ que tenemos que cambiar es el de nuestra cabeza. La transparencia debe ser prioridad”, agregó en respuesta a quienes proponen que las boletas no tengan ‘chip’ de trazabilidad y que las máquinas de votación sólo cumplan la función de impresoras.