El Gobierno está cerca de conseguir los votos, pero el resultado es incierto. El oficialismo negociaba hasta último momento para intentar alcanzar el apoyo de los espacios dialoguistas que le permita sostener la decisión presidencial. Las especulaciones sobre las ausencias y los respaldos sobre la hora. La amenaza de judicialización.
Exactamente una semana después de la segunda Marcha Federal Universitaria, el Gobierno se enfrenta este miércoles a la primera batalla legislativa para sostener el veto presidencial al proyecto de financiamiento de las casas de altos estudios, aunque advierte que la medida se va a judicializar si la oposición logra insistir con la iniciativa.
Sin los números garantizados, el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, continuaba hasta último momento con las negociaciones para tratar de conseguir el apoyo de los espacios dialoguistas que le permitirían al oficialismo ratificar la decisión de Javier Milei en la sesión que comenzará a las 11:00.
Si bien gran parte de la actividad del día previo se desarrolló en el Congreso, en la Casa Rosada siguieron de cerca los acontecimientos, una vez más, y confiaban en alcanzar un triunfo sobre la base de varias ausencias y algunos respaldos de último minuto.
Perdió un aliado
Con Oscar Zago de viaje en España por cuestiones personales, La Libertad Avanza perdió un aliado clave, ya que el jefe del bloque del MID suele acompañar la posición del Poder Ejecutivo, aunque los otros dos integrantes de la bancada, Eduardo Falcone y María Ibáñez, sí estarán.
Por su parte, la libertaria Lilia Lemoine, que estuvo recorriendo Ucrania en medio de la guerra con Rusia, volvería a tiempo a Buenos Aires para dar su voto.
Los números que se manejan en los despachos en Diputados muestran que hay entre 80 y 84 votos a favor del veto, 160 a 164 por la insistencia en la norma, 4 ausentes y entre 11 y 13 en duda. En este escenario, nadie puede asegurar si logrará imponer su postura hoy en el recinto y la incertidumbre reina en todos los bloques.
fuente: infobae