Novak Djokovic revalidó su título de Wimbledon este domingo al vencer en cinco sets a Roger Federer 7-6 (5), 1-6, 7-6 (4), 4-6 y 13-12 (7-3) y haber levantado un doble match point.
Los dos jugadores se han enfrentado ya 48 veces en 13 años -siete más que Federer con el español Rafael Nadal- y el serbio lleva la delantera con 26 victorias contra 22.
El número 1 del mundo salió victorioso del primer set, fue 7-6 (7-5 en tie break) tras haber batallado durante 58 minutos ante su inmediato perseguidor en el ranking ATP. Sin quiebres, este primer episodio dio pistas de lo que parecía ser una reñida final entre los dos mejores tenistas del mundo.
Federer se recuperó rápidamente y el segundo set fue 6-1 en apenas 25 minutos, con tres quiebres, una muestra de lo que el tenista de Basilea puede lograr cuando se lo propone. Sin embargo, el tercero volvió a ser una batalla ganada por Djokovic en el tie break por 7-4.
Recién en el cuarto set el serbio pudo quebrar un saque, pero fue en vano porque el suizo mostró su mejor nivel y se impuso 6-4.
El quinto fue un lujo para los fans que pudieron deleitarse con el alto nivel demostrado por ambos. Djokovic pudo quebrar en el sexto game, pero inmediatamente después Roger se recuperó y volvió a igualar el marcador.
La definición se estiró hasta el tie breack, luego de que “Nole” lograse levantar un doble match point.
Con este triunfo, Djokovic suma su 16° título de Grand Slam, el quinto sobre césped, y se acerca al español Rafael Nadal, que cuenta con 18.
“Creo que ésta fue, si no la final más excitante en la que haya tomado parte, sí una de los dos o tres mejores de mi carrera”, afirmó el serbio al levantar el trofeo tras un quinto set de infarto que duró dos horas.
Djokovic venía de ganar además los últimos cuatro grandes enfrentamientos contra el suizo, que no logra derrotalo en Grand Slam desde la semifinal de 2012 en Wimbledon.
Se volvieron a encontrar en 2014 y 2015 en final sobre la hierba del All England Club londinense y el serbio dominó en ambas ocasiones. La última vez que se cruzaron en uno de los cuatro grandes torneos remonta a enero de 2016, en la semifinal del Abierto de Australia, y el suizo volvió a caer.