Dueños de la cocina renovó la apuesta de la competencia dentro de un género probado y aceptado por la audiencia de Telefe. Ahora, el canal no solo es sede de diferentes adaptaciones dedicadas a buscar un ganador, sino que agrega un nuevo ciclo a su lista de formatos originales.
Después de dos temporadas de MasterChef, dos en versión adulta y otras dos su versión junior, Telefe se animó a abrir su propio restaurante y plantear una competencia con un público dividido en dos grupos y dos jurados bajo la misma modalidad. El televidente estará de mirando desde su casa, mientras que el segundo grupo de espectadores será protagonista como comensal. El jurado, integrado por Narda Lepes, Donato De Santis y Christhope Krywonis, se encargará del lineamiento de la competencia, pero quienes tendrán la decidió final serán aquellos que participen a través de la app para celulares.
El primer capítulo devolvió el ritmo a la competencia dentro del rubro gastronómico. La apuesta optó por Marley como mediador, experimentado en su rol y fiel compañero del canal. Una nueva integrante dentro del jurado, pero reconocida, tanto en la cocina como en la televisión, y dos figuras masculinas que supieron imponer la misma dosis de carisma que de autoridad frente al reloj que limita a los participantes a terminar sus platos. Todo organizado por un amplio equipo de producción capaz de montar un reality con múltiples ritmos y sabores.
Dueños de la cocina reúne los instrumentos necesarios para aprobar en el menú del domingo, poniendo sobre la mesa nuevos ingredientes que le generan al espectador el deseo de repetir el plato.
El acierto no sólo se manejará en números de rating (alcanzó 13.4 puntos. Ganó cómodamente su franja y fue el quinto programa más visto del domingo)., sino que permitirá, a nivel empresarial, agregar al catálogo del canal una competencia culinaria “made in Argentina”.