Gustavo Villagra, director de la Academia Belgrano, comparte la clave del éxito en la formación de los jóvenes que quieren ingresar a las distintas fuerzas armadas y de seguridad, nacionales y de la provincia.
Luego de 11 años en la formación y preparación de alumnos para el ingreso a distintas fuerzas armadas, Gustavo Villagra, el director de la Academia Belgrano, ubicada en Ayacucho 589, recuerda cada uno de los rostros de aquellos jóvenes que hoy se desempeñan en la Armada Argentina, Ejército, Fuerza Aérea, Gendarmería, Policía Federal y Policía provincial, entre otras. Mientras se prepara la capacitación para ingresar a la Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea, que se iniciará el 13 de octubre próximo, Villagra sostiene que la clave del éxito de la institución que dirige se basa en la formación en valores. “Esto no es declamativo. Es importante que el joven cultive y ponga en práctica muchos valores, de los cuales considero que el amor a la Patria es fundamental, porque va desde no tirar un papel en la vía pública hasta ser solidario con los demás. No es casualidad que muchas fuerzas policiales tengan el lema: entrar para aprender, salir para servir”.
Rememorando la idea que originó el actual emprendimiento, Villagra reconoce que se le ocurrió cuando pertenecía a la Armada Argentina. “Allí uno ve el producto terminado, la capacidad, predisposición y la amplia gama de oportunidades que tienen los jóvenes para desempeñarse. Me encontré con el producto terminado, pero me di cuenta que había muchas falencias a superar, en la previa al ingreso. Surgió entonces la necesidad de crear un ámbito en el que se pudiera dar respuestas a estas necesidades, la Academia Belgrano”.
“Ahora estamos preparando el ingreso a la Armada Argentina, en la que hemos logrado que ingresen muchos jóvenes, algunos que nunca habían salido de las localidades en donde nacieron y crecieron. Es un orgullo saber que muchos de ellos recorrieron el mundo en la Fragata Libertad y comprobar, de ese modo, que la Armada es la llave que abre las puertas del mundo”, expresa Villagra con orgullo, mientras que reconoce la labor fundamental de su esposa Mariela, de sus colaboradores y el personal docente con el que cuenta para ayudar a los jóvenes a alcanzar sus objetivos.
Sostuvo además que “nosotros no construimos conocimientos solamente sino que fortalecemos los principios morales y trabajamos en los valores que hacen a la formación integral. No somos una simple academia que prepara en contenidos y destrezas físicas sino que vamos más allá”.
También compartió con Diario Cuarto Poder, diversas experiencias entre las que se destacó la llamada “vigilia de estudio”, en la que los jóvenes se quedan en el establecimiento durante la noche y viven una experiencia conjunta de estudio. “Otros jóvenes salen a bailar, los nuestros se quedan a estudiar”, resume el director.