La demanda de combustibles baja con fuerza en medio de la recesión y la suba de precios. Es más pronunciado aún en las fronteras, porque ahora es incluso más cara en territorio argentino.
Mientras varias de las provincias enfrentaron una caída en el consumo de dos dígitos, como es el caso de Misiones, con el 29%.
Esto se explica por dos razones: es la provincia con los precios de los combustibles más caros del país y también registró la baja en la demanda de automovilistas de países vecinos.
Esto se replicó en otras ciudades fronterizas argentinas como Puerto Iguazú (50%), Posadas (36%), Formosa (60%).
Pero hay una salvedad que para muchos sigue siendo una ventaja: el encarecimiento del combustible en dólares es menor si se toma el tipo de cambio blue.
El gasoil no se salva: también está en retracción
El gasoil, en cambio, cae en todo el país excepto en la Patagonia. Su mayor caída se registra en la región del noreste argentino, la cual abarca justamente Formosa y Misiones. El informe de la consultora explica que el 40% del total de la demanda radica en la región pampeana.
La mayor retracción en dicha área se dio en el gasoil grado 3, con una disminución del 8% respecto a igual período de 2023. Entre tanto, la demanda de gasoil grado 2 disminuyó un 3% interanual a nivel nacional.
¿Cómo viene la brecha entre el gasoil y el resto de los combustibles?
La brecha de precios entre las naftas y el gasoil en los últimos dos años se redujo a la mitad, desde que la crisis de abastecimiento incrementó el precio del gasoil en el mercado nacional.
Esto se mantiene ya que, en general, la caída en la demanda de combustibles se dio en los productos grado 3. Lo cual llevó a las principales refinerías a disminuir la brecha de precios con los combustibles grado 2, según explica el informe.