El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional aprobó este viernes un nuevo desembolso de 10.800 millones de dólares que llegarán los próximos días al Tesoro, lo que dará un alivio financiero al Gobierno. El FMI dice que hay indicios de que la recesión “ha tocado fondo”, pero pide a la administración de Mauricio Macri “prudencia en la ejecución de los gastos”. También advierte sobre la política para bajar la inflación. “Los resultados en términos de la inflación han decepcionado”.
La luz verde llegó luego de que el board analizara durante un encuentro este mediodía en Washington los números de la economía argentina que le presentó el técnico Roberto Cardarelli, el jefe de la misión que estuvo en nuestro país en febrero.
En un comunicado difundido tras la reunión, que duró cerca de una hora y media, la directora gerente del Fondo, Christine Lagarde, dijo que “las políticas de las autoridades que sustentan el acuerdo respaldado por el FMI están dando fruto. El elevado déficit fiscal y en cuenta corriente —dos grandes vulnerabilidades que condujeron a la crisis financiera el año pasado— están disminuyendo. La actividad económica se contrajo en 2018, pero hay indicios de que la recesión ha tocado fondo, y se espera una recuperación gradual en los próximos trimestres. Sin embargo, la inflación sigue siendo elevada; las expectativas inflacionarias están aumentando y la inercia inflacionaria resulta difícil de quebrar”.
El Directorio Ejecutivo del FMI concluye la tercera revisión en el marco del Acuerdo Stand-By a favor de #Argentina, aprueba desembolso de USD 10.800 millones. Lea el comunicado de prensa: https://t.co/9JvmJnL87v pic.twitter.com/lHXsxgPQnk
— FMI (@FMInoticias) April 5, 2019
Lagarde agregó: “El gobierno argentino dio muestra de su determinación de asegurar que la relación deuda pública/PIB se encuentre en una trayectoria sostenible, reduciendo el déficit primario de 2018 por debajo de la meta fijada en el programa”.
Sin embargo, lanzó una luz de alerta: “No obstante, a la luz de un nivel inferior al esperado del ingreso tributario en el primer semestre del año, será crítico actuar continuamente con prudencia en la ejecución de los planes de gasto y tomar otras medidas para incrementar los ingresos fiscales a fin que la posición fiscal de 2019 llegue al balance primario. Es necesario redoblar los esfuerzos por mejorar el marco fiscal a mediano plazo y la gestión de deuda.”
El Directorio Ejecutivo está conformado por 24 representantes de todos los países miembros (algunos directores representan a un grupo de naciones), pero pesan más los votos de las economías más poderosas, que son las que aportan más dinero al organismo, entre ellas Estados Unidos, Japón, China, Alemania, Canadá, Francia, Gran Bretaña, Italia. Se descartaba que el nuevo desembolso sería aprobado.
La reunión estuvo presidida por Lagarde. Los directores pudieron hacer preguntas específicas a los técnicos. Con el desembolso aprobado hoy, ya suman casi 40.000 millones de dólares los otorgados por el organismo, de un total previsto de 57.600. El FMI daría hasta diciembre, cuando se vence el mandato del presidente Mauricio Macri, 51.200 millones.
El dinero aprobado hoy llegará en un par de días hábiles a las arcas del Tesoro. No arribarán directamente a nuestro país, sino a través de un sistema que es habitual en estos casos y que incluye movimientos bancarios en la ciudad suiza de Basilea. Para movilizar el préstamo, el organismo utiliza generalmente el Bank for International Settlements (conocido como BiS), que es una institución internacional que funciona como si fuera un banco de los bancos centrales de todos los países miembros del FMI. De allí va a la Argentina. El trámite suele demorar solo un par de días hábiles por lo que entre martes y miércoles el dinero llegaría al Tesoro.
Mientras los dólares de los agroexportadores se hacen esperar, el Gobierno tendrá así más alivio para enfrentar gastos. También podrá licitar los 60 millones de dólares diarios, una medida que acordó recientemente con el organismo, lo que servirá para bajar las tensiones cambiarias en tiempos electorales.
En su comunicado, Lagarde señaló que “tras unos meses de relativa estabilidad, la volatilidad financiera ha repuntado en las últimas semanas, dado que las condiciones financieras mundiales se han tornado menos favorables y los resultados en términos de la inflación han decepcionado. El BCRA reaccionó frente a esta situación recalibrando la política monetaria, manteniendo el crecimiento cero de la base monetaria hasta finales del año. Se ha elevado al Congreso una nueva carta orgánica del banco central que, de ser aprobada como ley, afianzará la credibilidad de la política monetaria”.
Hizo hincapié también en la situación social: “Proteger a los más vulnerables del impacto de la recesión y de la elevada inflación sigue siendo una prioridad crítica. Las autoridades han tomado una serie de medidas para mejorar la cobertura de la red de protección social y proporcionar más recursos a los pobres. Se necesitará un trabajo continuo para abordar las brechas restantes en la cobertura de la red de protección social y para mejorar la eficacia de los programas sociales en la lucha contra la pobreza”.
Luego señaló que “las condiciones de mercado favorables le han permitido al gobierno refinanciar integralmente la deuda que vencerá durante los próximos meses. La tasa de interés pagada por esa deuda ha disminuido y las autoridades están redoblando los esfuerzos por prorrogar los vencimientos de la deuda recién emitida. Las autoridades también están implementando políticas para desarrollar los mercados de deuda en moneda nacional”.
Luego se refirió a ciertas prioridades: “Las reformas del lado de la oferta son esenciales para lograr un crecimiento vigoroso, sostenible y equitativo y para mejorar los niveles de vida de la población argentina. Las prioridades incluyen esfuerzos adicionales por crear un sistema tributario menos distorsionados, promover una mayor competencia en los mercados internos de productos, eliminar las barreras al comercio internacional y a la inversión extranjera, afianzar la gobernabilidad, hacer frente a la corrupción y promover la equidad de género”.
Finalmente, dijo que “el éxito de los planes de políticas de las autoridades depende de una implementación continua y resuelta. Esto requerirá la construcción de un apoyo amplio a favor de políticas que mitiguen las vulnerabilidades económicas, incrementen el potencial de crecimiento de Argentina y promuevan la confianza del mercado.”