Sebastián Piñera, el mandatario trasandino, debió desistir porque la resolución de la designación de su hermano, criticada por presunto “nepotismo”, podría llevar varios meses.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, finalmente desistió de designar a su hermano, Pablo Piñera Echenique como nuevo embajador de Chile en la Argentina, en lo que había sido un claro gesto hacia su par argentino y amigo Mauricio Macri.
Dentro de las razones, el mandatario trasandino estipuló que el nombramiento del embajador en el país es “urgente y no es compatible con los tiempos de la Contraloría”.
“Es mi convencimiento que, en el mejor interés de Chile, el nombramiento del Embajador de Chile en Argentina es urgente y no es compatible con los tiempos estimados e informados por la Contraloría para pronunciarse sobre dicho requerimiento”, afirmó el presidente Piñera, en un comunicado difundido por La Moneda.
Pablo Piñera Echenique.
A raíz de su decisión, relató en el texto que “me he reunido con mi hermano para comunicarle que he desistido de su nombramiento“.
La denuncia, hecha por dirigentes del Partido Socialista chileno y del comunismo, argumentaba que la designación de un hermano, como el caso de Pablo Piñera Echenique, está prohibido en el artículo 8 de la Constitución del país vecino, que impide la designación en cargos de responsabilidad pública a familiares directos.
Asimismo, los denunciantes señalaron que la ley general de bases de la administración del Estado en su artículo 52 especifica la inhabilidad para nombramientos y llega hasta los sobrinos.
No obstante el mandatario trasandino reiteró su “convicción que Pablo Piñera reúne todas las condiciones necesarias para ser un buen embajador” y que “cumple con todos los requisitos legales para ser designado en dicho cargo”.
Mas aún, Sebastián Piñera asegura que, en su opinión, “no ha habido ningún acto de nepotismo“, ya que “su nombramiento no obedecía al hecho de ser mi hermano ni a ningún interés particular”.
El contralor general de la República de Chile, Jorge Bermúdez, había asegurado el jueves último que estaban estudiando la presentación de la oposición y que se aprestaban a pedirle al gobierno de Sebastián Piñera un informe para lo cual tenían un plazo de 10 días para responder.
Sin embargo, lo que determinó que el presidente de Chile desistiera en el nombramiento de su hermano, fue lo que el contralor Bermúdez señaló después a la CNN, respecto de los plazos que llevaría resolver sobre el asunto: “Es una presentación parlamentaria que se denomina una solicitud de pronunciamiento y eso efectivamente en los casos habituales tiene una tardanza que puede ser de seis meses. Obviamente, nosotros vamos a tratar de ser lo más diligentes posibles”, dijo, sin dar mayores precisiones.