Así lo indicó Mercedes D’Alessandro, y agregó que el 55, 7% de quienes reciben los 10.000 pesos del Ingreso Federal de Emergencia son mujeres. También los refuerzos en la AUH y la jubilación mínima llegaron, en mayor medida, a la población femenina que tiene menores ingresos y realiza mayores tareas de cuidado. El diseño de la política económica tuvo por primera vez perspectiva de género y cuido especialmente a las trabajadoras de casas particulares.
El Ingreso Federal de Emergencia (IFE), creado para amortiguar el impacto de la crisis económica producto del párate mundial por la pandemia de Covid -19, lo cobraron un 55,7 por ciento de mujeres entre 8.900.000 beneficiarios/as. El refuerzo en las jubilaciones mínimas se dirigió especialmente a las adultas mayores ya que se destinó a un 67,3 por ciento de mujeres entre 2.677.773 personas. Los bonos de la Asignación Universal por Hijo (AUH) los cobran un 94,7 por ciento de mujeres entre 4.607.099 beneficiarias/os.
Casi 9 millones de personas
En Argentina más de 8,9 millones de personas recibieron ya dos pagos de IFE, entre abril y julio. En agosto se prevé un nuevo pago. Aunque no alcanza, la situación sería mucho más grave si no estaría ese colchón especialmente para las mujeres (el 55, 7 por ciento del total de beneficiarios/as) y jóvenes (ya que el 61,5 por ciento de quienes lo cobran tienen entre 18 y 34 años).
Mujeres a la cabeza
El impacto en las mujeres no es casual, sino producto de la incorporación formal de la perspectiva de género en el Ministerio de Economía que tuvo en cuenta, aún en el apuro de generar una herramienta social frente a una crisis inesperada, que las mujeres son mayoría en el empleo informal (y que la brecha salarial llega al 36,8 por ciento cuando no están registradas).
Distribución
La distribución del IFE es marcadamente progresiva en términos de género: de acuerdo a datos de ANSES el 55,7% de quienes lo perciben son mujeres (4,9 millones) y 3,9 millones de varones”, destaca el informe “Políticas públicas y perspectiva de género”, elaborado por Mercedes D’Alessandro, Sol Prieto, Victoria O’Donnell y Florencia Tundis, de la Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género, del Ministerio de Economía.
Las mujeres rezagadas
“Hay brechas de género muy pronunciadas: las mujeres ganan un 27 por ciento menos que los varones y esa brecha se amplía cuando se trata de trabajo informal, que llega al 38 por ciento, tienen más obstáculos para insertarse laboralmente, recae sobre ellas el cuidado de hijas e hijos y, frente a la pandemia, todo esto se amplifica porque aumentan las dificultades laborales de la población y la carga de tareas domésticas” contextualiza la Doctora en Economía Mercedes D´Alessandro, autora del libro “Economía Feminista” y Directora Nacional de Economía, Igualdad y Género.
Asimetrías
“La respuesta tenía que considerar esta asimetría y volcar un poco más de recursos sobre las mujeres para que ellas pudieran transitar esta situación sin salir todavía más perjudicadas que antes. Por eso, se pensaron medidas para llegar a las mujeres más vulnerables: quienes reciben la AUH, quienes reciben la tarjeta Alimentar, las que cobran la jubilación mínima y las trabajadoras de casas particulares”, enumera D´Alessandro.
fuente: infobae