Por Manuel Rivas* director de Diario Cuarto Poder | “Jesús nunca te abandona”. En esa frase se sintetiza el mensaje que dejó Sergio Hernández, el mismo joven que el año pasado, en pleno aislamiento, protagonizó un Via Crucis en Yerba Buena.
El “Jesús de la pandemia”
El Viernes Santo del año pasado fue noticia por realizar un solitario Via Crucis desde la rotonda del pie del cerro hasta el Cristo, a lo largo de toda la ciudad de Yerba Buena. Lo hizo como un acto de fe y para señalar que “Jesús estaba al lado de la gente”.
Ataviado con una túnica y cargando una gran cruz de metal, hizo el recorrido en soledad, y sólo se interrumpió un momento para atender la requisitoria de un policía, pero todo se hizo con normalidad y con gran repercusión.
“Todo se dio de una manera especial porque en dos semanas surgieron cosas que me llevaron inexorablemente a la decisión de realizar un Via Crucis para llamar a la reflexión a la gente en medio de la pandemia y llevarles la fe de buscar a Jesús”.
Un nuevo Via Crucis pero con menos ruido
Este Viernes Santo también tuvo de protagonista a Sergio Hernández en el Via Crucis, pero con menos repercusión. “Este año no tenía bien en claro hacerlo de nuevo, pero todo se dio desde el Día de San José, como si fueran señales inequívocas”, contó.
“Tuve un sueño. Era corto pero claro. Entraba en una habitación en donde había muchas sotanas tiradas en el suelo y alguien que estaba vestido con mi ropa levantaba la cruz de metal sin que pudiera ver su rostro”, prosigue.
“Esa persona tenía el pelo largo y sentí en mi corazón que era Jesús. En el momento en que la cruz estuvo de pie, desperté con la sensación de que se trataba de volver a hacer el Via Crucis, pero aún no lo había decidido”, expresó.
La decisión
Sergio siguió comentando: “después me dije que si un sacerdote hablaba conmigo del tema, lo haría. Fui a mi parroquia y no hallé al sacerdote y cuando me estaba yendo pasé por la secretaría y encontré al vicario con quien hablé”.
“Me explicó que la Iglesia no podía hacer Via Crucis, pero que lo que yo hiciera era mi decisión personal y me bendijo, lo mismo que a la cruz que había llevado en la ocasión anterior. Allí tomé la decisión”, explicó.
“En esta oportunidad, no hubo tanto ruido como el año anterior, pero lo importante para mi es que la gente se acerque a Jesús, porque en medio de la pandemia sentí que había un vacío importante de Dios entre la gente”, puntualizó.
“No saldremos mejor de la pandemia”
Consultado sobre la frase que decía que de la pandemia saldríamos mejores, sostuvo que “no saldremos mejor de la pandemia, porque la mayoría de las personas mostraron sus miserias y el egoísmo que tienen”.
Señaló que “incluso los sacerdotes están más enfocados en los problemas terrenales y lo que la gente necesita son mensajes que tengan más espiritualidad, que lleven a la elevación de las personas, a ser mejores cada día”.
“La gente está sometida a mensajes de la televisión y las redes en donde los famosos cuentan cómo pasan la pandemia, pero nadie se acuerda de Dios, ni del sufrimiento de Cristo para redimirnos de los pecados y abrirnos las puertas a la vida eterna”.
Pedidos especiales
En este renovado Via Crucis, Sergio Hernández, quien dice que lo más importante es el mensaje de Jesús, realizó pedidos especiales en las distintas paradas que hizo, como el pedido de protección a la Iglesia, por el Papa, los sacerdotes y los enfermos.
“Hay que recuperar el camino espiritual que nos lleva a Cristo, sólo a través de él llegaremos al Padre Celestial y para ello tenemos que superar los obstáculos que nos pone la vida terrenal pensando que Jesús está a nuestro lado”, dijo.
“Son tiempos difíciles y la pandemia no ha finalizado. La humanidad entera no saldrá mejor de este trance mundial, pero muchos tendrán la oportunidad de buscar el camino correcto, porque Jesús no te abandona”, finalizó.
*Profesor de Letras e Historia, periodista y escritor.