El normalizador de la AFA, Armando Pérez, buscó una solución “democráctica” para ver quién iba a la Copa Libertadores: convocó al resto de los integrantes de la Junta Regularizadora y se llevó a cabo una votación. Tres levantaron la mano a favor de Atlético Tucumán. Sólo uno apoyó la postura del Rojo. La resolución del conflicto recién será oficializado mañana miércoles. Los tucumanos jugarán la próxima edición de la Copa.
Pérez quiso quedar bien con Dios y, fundamentalmente, con el Diablo. Aconsejado por Víctor Taboada, secretario de la AFA y simpatizante de Independiente con abono a platea, Don Armando fue el único que puso en consideración la posibilidad de un desempate. En cambio, Javier Medín, Carolina Cristinziano y Pablo Toviggino -dirigente del interior- creyeron que era injusto beneficiar a Independiente y que la resolución de Conmebol era muy clara, correspondía al quinto del torneo pasado. En definitiva, los tucumanos, que sumaron 30 puntos, tres más que su ilustre rival. Por otro lado, el Reglamento de la AFA marcaba en su punto 7.5, inciso a. 2, que en el caso de que un equipo argentino ganara la Copa Libertadores 2016 y se generara una nueva plaza, sería para el mejor tercero de ambas zonas.
Como el cupo extra derivó de la amplitud de los participantes y el campeón continental fue Atlético Nacional, Independiente reclamó su lugar. Y mientras los tucumanos festejaban en la Casa de Gobierno provincial, el presidente Leito era prudente. El partido se jugaba en los escritorios de Viamonte. Y ya había un antecedente de un equipo chico (Vélez) que había celebrado la clasificación y terminó perdiéndola con un club grande (Boca) por la letra chica del Reglamento.
Esta vez, 3 a 1 ganó Atlético Tucumán. Y encendió la bronca de todo Independiente, que se llamó a silencio. Consultados por Clarín, los dirigentes advirtieron que, hasta que no haya una comunicación oficial, no hablarán del tema. Después de perder en la Copa Argentina ante Defensa y Justicia y ser eliminado por Chapecoense de la Copa Sudamericana, se ilusionó con entrar por la ventana reglamentaria a la Libertadores.
Fuente: Clarín