La interpelación de Julio César “el Cola” Herrera, secretario de Gobierno del intendente de Concepción, no se llevó a cabo gracias a la intervención del ministro del Interior, Miguel Acevedo, quien hizo desistir al presidente del Concejo Deliberante, Carlos Funez.
El recinto del Concejo Deliberante de Concepción se encontraba colmado de docentes municipales, funcionarios y curiosos. No era para menos, las denuncias de maltratos que habían realizado los educadores, que tenían como responsable al secretario de Gobierno, Julio César “el Cola” Herrera, habían derivado en una interpelación votada por unanimidad por la totalidad de los ediles.
La iniciativa había sido planteada en su momento por el concejal José Calcagni. El apoyo unánime hacía presagiar que la presencia de Herrera en el recinto iba a tener todos los condimentos, en especial, por los fuertes cruces que se dieron entre los actores en las redes sociales, además del aporte que hicieron los allegados y obsecuentes del secretario de Gobierno.
Los docentes de la Escuela Octavio Muedra Tasquer veían en el Concejo Deliberante la caja de resonancia para la solución de sus problemas y para detener el maltrato y avasallamiento de los funcionarios de la gestión del intendente, Roberto Sánchez. Sin embargo, Herrera nunca se presentó en el recinto. Se limitó a enviar una nota en la que no sólo se negaba a admitir las acusaciones, sino que también sostenía que no estaba obligado a presentarse en el Concejo Deliberante. “El Cola”, como se lo conoce al titular del área de Gobierno, no fue el único ausente, ya que también fue notoria la ausencia del propio presidente del Concejo Deliberante de la “Perla del Sur”, el peronista Carlos Funez.
El pacto Acevedo-Sánchez
La actitud de Funez desconcertó a muchos, porque había mantenido una postura de apoyo a la iniciativa de Calcagni pero, en los últimos días se habían notado ciertas actitudes que no lo mostraban tan crítico para con la gestión de Sánchez. En esta linea de acción, el titular del cuerpo deliberativo había criticado al Gobierno nacional por la falta de envío de recursos a Concepción, o sea al gobierno encabezado por el ex piloto de rally.
El convencimiento de Funez habría sido obra del propio ministro del Interior, Miguel Acevedo, quien quiso resguardar de todo desgaste político a Sánchez. El pacto secreto entre ambos tiene relación con actitudes similares, como la del intendente de Yerba Buena, Mariano Campero, quien autorizó una excepción al código de Planeamiento Urbano de esa ciudad, avalando las torres construidas en abierta violación a las normativas vigentes por la firma Alperovich Group SA.
No extrañaría que estuviera detrás de este favor el propio senador nacional José Alperovich, con quien el ministro del Interior tiene una subordinación excesiva.
La sesión se llevó a cabo
A pesar de la ausencia del presidente del Concejo, la sesión estuvo a cargo del vicepresidente Adolfo Saracho. Los ediles se expresaron ante la presencia de los docentes y los funcionarios de segunda línea del municipio, quienes en varias ocasiones debieron ser llamados al orden por interrumpir la sesión con sus expresiones. Fueron a defender a “El Cola” Herrera, cuando éste tuvo la oportunidad de hacerlo personalmente y la desaprovechó.