Los afiches con la imagen del titular del Movimiento de Unidad Popular (MUP), Luis Romano, y la dupla gobernante, Juan Manzur y Osvaldo Jaldo, inquietaron y mostraron que ese espacio no se quedará de brazos cruzados en la contienda legislativa nacional que se avecina. El diálogo de Diario Cuarto Poder con Romano.
La afichada amaneció en estos días en distintos puntos de la provincia. Y encendió luces de alerta en las filas del justicialismo tucumano. No se trata sólo de la imagen de los referentes que aparecen en el afiche sino también de la leyenda: “todos unidos triunfaremos”. Una frase más que sugestiva.
Sin embargo, trascendió que se trata de un espaldarazo a la fórmula gobernante, aunque hasta el momento todo lo que se publique es extraoficial porque Romano, quien tiene una de las estructuras más aceitadas del peronismo en el interior, con militantes presentes en cada una de sus comunidades, aún no se refirió oficialmente a la causa de estos afiches.
El espacio se consolidó y demuestra la madurez suficiente para mantener un buen diálogo con las autoridades de Desarrollo Social de la Nación, lo que ha posibilitado que se pueda consolidar la contención de la gente en comedores y merenderos del MUP, a lo largo y ancho del país, y con especial énfasis en nuestra provincia. Además de acceder a un cupo importante para garantizar el funcionamiento de las Cooperativas Argentina Trabaja. Todo lo que se había negado durante el “kirchnerismo”, por ser la agrupación rival de “La Cámpora”, ahora es consolidación.
Otra es la realidad de la otrora agrupación preferida de Cristina, que a un año de no estar en el poder, casi desapareció del territorio.
Consultado sobre el presente del espacio que lidera, Romano expresó: “doce años enfrentamos al alperovichismo y nos decían que estábamos locos, que íbamos a desaparecer y crecimos. No nos fuimos del PJ, con los pies en el plato y en lucha desigual fuimos a las PASO del 2013 para demostrar que nuestra disidencia. No nos entendieron en ese momento, nos enfrentamos a La Cámpora en su momento de mayor poderío y también nos dijeron que nos íbamos a extinguir. La realidad es que seguimos creciendo”.
“La Cámpora desapareció sin el padrinazgo nacional y el alperovichismo sin billetera se redujo notablemente, mientras nosotros consolidamos en el territorio la estructura militante y seguimos creciendo. Estamos cerca de la gente, con la misma convicción de siempre. Eso es hacer política, pensar que se puede transformar la realidad de la gente, pero cerca de sus problemas, comprometidos, no como si fuera una dádiva que humilla. Queremos poner a los humildes de pie, porque ese es el pensamiento del justicialismo”, finalizó Romano.