Tras la derrota ante Gales el entrenador tucumano anunció su despedida, más allá de que dirigirá el sábado ante Escocia.
En los pasillos del estadio de Colón, previo al partido entre Los Pumas y Gales, flotaba en el ambiente un aire denso sobre la continuidad de Daniel Hourcade. La derrota en San Juan, el sábado pasado, y la de esta jornada por 30-12, generó que ese clima se trasladara a la sala de prensa. Y llegó el anuncio esperado…
“No hubo respuesta. El mensaje ya no llega. Es un ciclo cumplido y listo. Habíamos hablado con la dirigencia para ver qué pasaba en la ventana de junio. Así que vamos a ver qué sucede con Escocia. Hasta ese partido seguiremos y esperemos que los chicos hagan el buen rugby que hasta el momento no pudieron hacer”. Con estas palabras, visiblemente acongojado por la situación, Hourcade anunció su salida de Los Pumas.
“Me parece que no tiene sentido prolongar una agonía porque es un ciclo cumplido”, agregó sin que nadie se lo preguntara, a sabiendas de que la llegada de Mario Ledesma a Jaguares y su seguidilla de triunfos en el Super Rugby había condicionado al entrenador tucumano en el seleccionado argentino.
Desde que Los Pumas fueron cuartos en el Mundial de Inglaterra 2015, sólo pudieron lograr seis victorias y sufrieron 21 derrotas.
Ya durante el partido, una imagen de la transmisión oficial mostró a Hourcade tomándose la cara con las dos manos y quedándose con ellas en su rostro durante un largo rato, tras una sucesión de errores absurdos de sus dirigidos.
Sus palmas se juntaron como quien implora un favor. Todo un gesto que tomó valor minutos después. En la conferencia, las miradas, los gestos y los movimientos nerviosos preanunciaban lo que el propio Hourcade daría a conocer.
“El vestuario estaba triste. Saludamos a todos los chicos. Los jugadores vienen mostrando su capacidad, porque hay un crecimiento individual que el staff de Jaguares supo aprovechar notablemente. Siempre hablamos de aprovechar el envión y no se dio. Es crudo pero real: el mensaje no llega”, agregó Hourcade con su voz entrecortada y el sonido de los flashes de las cámaras que retrataban su imagen abatida por la coyuntura.
“Tal vez les pedimos más de lo que podían hacer. Asumimos la responsabilidad porque es nuestra. Es un grupo de jugadores que venía haciendo las cosas bien y tenía respuestas y ahora no. Llegaron de la mejor manera física, técnica y mental, pero no pudimos plasmarlo en la cancha”, concluyó.
Al lado de Hourcade, estaba Marcelo Rodríguez, el presidente de la Unión Argentina de Rugby. “Es importante destacar la generosidad con la que trabajó este staff. Es un proceso que le dio mucho al rugby argentino. Se cumplieron etapas importantes pero como en todo proceso hay un ciclo que se cumple. Lo habíamos hablado. La ventana de junio era importante y los resultados no se dieron. Haremos los cambios que tenemos que dar. No es una decisión fácil”, dijo mientras Hourcade miraba el suelo entre la desolación y la bronca.
“En reuniones que mantuvimos con el staff, analizamos los planes a futuro. He estado pensando en algunas opciones, tanto de Argentina como de fuera del país”, confió Rodríguez, quien adelantó que no dará nombres hasta que tenga cerrado el acuerdo con el próximo entrenador.
El último partido de Daniel Hourcade será el sábado, en Resistencia, ante Escocia. Tras ese enfrentamiento, los jugadores pasarán a formar parte nuevamente de Jaguares en el Super Rugby, bajo las órdenes de Ledesma.
Si bien Los Pumas recién volverán a jugar en agosto por el Rugby Championship, la UAR deberá definir tiempo antes no sólo por semejante torneo ante Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica sino porque se deberán ajustar detalles de cara al Mundial de Japón 2019.
fuente. clarín