De forma virtual, tal como lo presenciaron todas las autoridades de la provincia, el vicegobernador Osvaldo Jaldo participó del discurso del arzobispo Carlos Sánchez, cuya homilía se basó en la libertad. El arzobispo de Tucumán trazó paralelismos con el objetivo de los próceres de 1816 quienes nos legaron la independencia desde Tucumán.
Jaldo, tras participar del tradicional Tedeum al cumplirse el 205° aniversario de la declaración de la Independencia, señaló que acompañará al presidente de la Nación en los actos patrios en la Casa Histórica y reiteró su mensaje de unidad a todos los tucumanos y argentinos.
“Este es un 9 de Julio diferente; primero por esta pandemia que no nos ha permitido realizar los actos protocolares como a todos nos hubiera gustado; y segundo porque este 9 de julio, Tucumán vuelve a ser la capital del país. Es importante que el presidente Alberto Fernández esté visitando la provincia y que desde Tucumán envíe un mensaje de unión a todos los habitantes de la República Argentina”, apuntó el vicegobernador.
Agregó: “Quizás hubiésemos preferido un festejo más multitudinario, con mayor participación de la gente para que disfrute de este día festivo, pero se tuvieron que tomar protocolos sanitarios y cumplirlos a rajatablas, porque primero está la salud”.
Sobre la homilía del Monseñor Sánchez, Jaldo compartió la importancia de su mensaje: “Creo que hemos tenido un buen mensaje de Carlos (por el arzobispo) ya que hoy, más que nunca, los tucumanos tenemos que estar unidos, al igual que todos los argentinos. Hay que escuchar las palabras del Monseñor; son momentos difíciles, momentos de pandemia y los que tenemos responsabilidades institucionales tenemos que estar a la altura de las circunstancias. Hoy hay un pueblo que sufre, que tiene dificultades y tiene problemas; entonces, quienes gobernamos somos quienes mayor responsabilidades tenemos y hay que saber escuchar”.