La relación oscilante que tiene Elisa Carrió con Marcos Peña tocó quizás este domingo su punto más bajo: en la intimidad, la líder de la Coalición Cívica acusa al jefe de Gabinete de “entregar” a los vices Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, dos de los desplazados para la nueva organización. Carrió ya había mostrado el lado A de su mirada, cuando tuiteó que, para ella, se trataba de “los mejores funcionarios” del Gobierno.
Desde su casa de Exaltación de la Cruz, donde almorzó con amigos, Carrió sigue a distancia las negociaciones en la Quinta de Olivos. En su mensaje en redes sociales, la diputada blanqueó a quién acusa por el desplazamiento de los vices, que podrían ocupar un nuevo rol (menor) en la próxima organización.
“Los mejores funcionarios son Quintana y Lopetegui. No será esta la venganza de los laboratorios por haber bajado el 70% del precio de los medicamentos oncológicos del PAMI, y limitado el valor del resto de los medicamentos? Yo los apoyo. La verdad está en lo que no se ve”, tuiteó y cerró su mensaje con dos emojis: un beso y un corazón. Carrió pura.
El sábado, la líder de la Coalición ya había hecho trascender sus alarmas para esta nueva etapa de crisis. “Si vas a tener oportunistas y traidores en Cambiemos me vas a perder a mí”, le avisó al presidente Mauricio Macri. Aunque no hizo nombres, se sabe que es particular su encono con el radical Ernesto Sanz, uno de los que suena para volver al Gobierno. Por esas mismas horas, Carrió estuvo en contacto con Peña.
fuente. clarín