Durante la tarde de ayer y al igual que sus “primos de la Ciudadela”, cuatro integrantes del plantel Decano debieron ser aislados al dar positivo para coronavirus. El plantel se había presentado ayer junto al cuerpo técnico y los dirigentes de la institución en el Complejo Ojo de Agua para dar inicio a la pretemporada.
Todo se empañó cuando en los hisopados de rutina de Covid-19 dieron resultado positivo los test a Leonardo Heredia y Ramiro Carrera. Los otros dos jugadores que no pudieron presentarse a la práctica por estar cursando la enfermedad fueron Joaquín Pereyra, que aún no pudo regresar de Rosario, y Daniel Ibáñez.
A diferencia de San Martín, que decidió suspender los entrenamientos por 72 horas tras la confirmación de 5 casos positivos de covid-19, Atlético Tucumán no alteró sus planes y la primera práctico bajo la conducción de Juan Manuel Azconzábal se llevó a cabo con normalidad, duró casi dos horas y medio y los 29 jugadores (incluidos los refuerzos) respondieron bien las exigencias del nuevo DT.
La tarea más ardua, además de la preparación física y táctica para enfrentar los desafíos de este 2022, estará centrada en las negociaciones que lleven a cabo los dirigentes para sumar refuerzos y para definir el futuro de dos jugadores, uno de ellos es Augusto Lotti que es pretendido por el fútbol brasileño y el otro es Tomás Cuello, que sorprendió al presentarse al entrenamiento, ya que el club Bragantino no ejecutó hasta el 31 de diciembre la opción de compra. Al parecer Lotti y Cuello tendrían los días contados para emigrar de la institución decana.