Las acciones positivas que se inicien en Tránsito, deben acompañarse con actitudes desde adentro para tener éxito entre la gente y generar un efecto multiplicador.
Para que una medida del Gobierno, ya sea nacional, provincial o municipal, siempre hay que predicar con el ejemplo. Es por ello que, en el caso de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, que por estos días fue noticia positiva por el uso de altavoces para advertir, tanto a peatones como automovilistas, sobre las infracciones que cometen, los cuidados se deben extremar cuando se tratan de errores que cometen sus propios agentes.
Es por ello que la imagen de una camioneta del área, detenida sobre la senda peatonal, generó críticas por parte de los lectores de nuestra página web www.diariocuartopoder.com. En la escena se ve un pequeño espacio por el que pasan los peatones. Una de ellas es una madre, que va junto a su hijo, y que reclama airadamente al conductor del vehículo oficial. También se puede observar que el agente levanta su mano en señal de disculpa, pero la infracción ya fue cometida.
El hecho tuvo lugar en la esquina de Muñecas y Marcos Paz, según se puede identificar claramente.
Es posible que el área manejada por el efectista Enrique Romero, requiera de un trabajo interno de concientización, lo que no implica que se utilicen los altavoces en contra del personal de Tránsito. Para que uno haga cumplir con las normativas viales vigentes tiene que estar convencido, luego de ese convencimiento tiene que actuar en consecuencia y, finalmente, la propia comunidad sabrá reconocer ese esfuerzo y acompañar esas acciones con la simple y sana imitación.
La aplicación de los altavoces -cuya idea se habría sacado de una película norteamericana- fue replicada por medios locales y nacionales, pero debe venir acompañada del ejemplo de cada uno de los agentes de tránsito de la “Ciudad Histórica”.
Controles de alcoholemia
Por estos días también se produjeron buenas noticias en el ámbito capitalino, con la realización de controles de alcoholemia a conductores del transporte público en distintas arterias del microcentro de la ciudad. Con respecto a estas acciones, el subsecretario de Tránsito y Transporte Operativo municipal, Enrique Romero, quien supervisó el operativo, informó que la medida alcanzó a choferes de colectivos y de taxis.
“En lo que respecta a las empresas de transporte público, los turnos de los conductores son de 7 horas y media y es por eso que estamos realizando el operativo por la tarde, para constatar si algún chofer, durante su refrigerio al mediodía, consumió alcohol”, explicó.
El funcionario advirtió que “en caso de que algún chofer no apruebe el test de alcoholemia, el colectivo que maneja será retirado de circulación y enviado al corralón municipal, mientras que los pasajeros deberán esperar al coche siguiente”. Agregó que, en caso de constatarse una de estas infracciones, “habrá una sanción económica, tanto para el conductor implicado como para la empresa”.
Desde el área de Tránsito y Transporte municipal informaron que próximamente también se controlará el uso de medicamento que puedan afectar o disminuir los reflejos de los conductores. Para ello, se entregarán a la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ya la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) un vademécum con el listado de las medicinas que no son aptas para el consumo mientras se conduce un vehículo.