La agudización del proceso recesivo que afecta a la economía en su conjunto desde abril de 2018 determinó que en marzo volviera a contraerse el total de empleos registrados, principalmente en los tres grandes generadores de puestos de trabajo en el sector privado: la industria, el comercio y la construcción.
Se trató de la séptima declinación consecutiva, tanto en el cotejo intermensual corregido por estacionalidad como en la comparación del año previo, y acumuló 15 meses por debajo del máximo de la serie anotada en diciembre de 2017 cuando se aproximó a los 12,4 millones de personas empleadas en la ocupación principal registrada. La estadística no incluye los casos de pluriempleos. Acumuló una pérdida neta de 266 mil puestos respecto de marzo de 2018.
Mientras que desde el pico de la serie que se alcanzó en diciembre de 2017, con 12.387.300 personas ocupadas, se destruyeron 308.000 empleos netos; los cuales sumados a unos 335 mil por el mero crecimiento vegetativo de la oferta laboral total, implicaron la insatisfacción laboral para más de 665 mil trabajadores, sólo en el segmento formal que representa dos tercios del mercado de trabajo global.
Sólo los avances en materia de fiscalización del empleo en casas particulares, que incluye al personal doméstico y a los encargados y ayudantes en edificios de propiedad horizontal, como el aumento vegetativo en 3 de las principales actividades en el sector público, la enseñanza, la sanidad y el servicio de policía, posibilitaron que en esas franjas se mantuviera el crecimiento de la población ocupada.
Si bien en marzo se frenó el proceso de desaceleración de la caída del empleo registrado, en Trabajo, el subsecretario de Desarrollo y Planeamiento Productivo, Bernardo Díaz de Astarloa consideró: “lo vemos como una pausa, atribuible a la devaluación, y estuvo en línea con la baja que también acusó la actividad económica global, como ocurriera en enero de 2014 cuando también hubo un salto cambiario”.
Asalariados registrados
En el segmento específico de los trabajadores en relación de dependencia en el sector privado el relevamiento de Trabajo anotó una generalizada contracción, tanto en el mes, 0,2%, como en el cotejo interanual, 2,5%, a 6,16 millones.
Como en los meses anteriores las caídas más marcadas se localizaron en la industria 5,8%; comercio y reparaciones 3,9%; transporte y comunicaciones 3,3% y construcción, en todos los casos respecto de marzo de 2018.
Por el contrario, volvió a aumentar la nómina asalariada en las industrias extractivas, como se define a la de minas y canteras, 7,9%; pesca 5,3%; enseñanza 1,1% y agro 0,3 por ciento.
Los datos preliminares de abril dieron cuenta que en el caso del sector privado el empleo mantuvo una tasa de caída de 2,6% para el total de los aglomerados urbanos relevados por Trabajo; más intenso en el Gran Buenos Aires (2,9%) que en el interior del país(1,7%), por efecto principalmente de la reactivación de la producción de la economía agrícola pampeana, y de la rama energética, vinculada con la explotación del reservorio de Vaca Muerta.
Las expectativas de los empresarios para el trimestre abril a junio se mantuvieron en la senda moderadamente contractiva.