Si bien la enfermedad que afecta severamente a la planta de citricos está ausente en Tucumán, ya se detectó presencia en Chaco, Santiago del Estero, Misiones, Formosa y Entre Ríos.
“Trabajamos para mantener a Tucumán libre de la enfermedad HLB y el insecto vector”. Así lo expresó la Ing. Beatriz Carrizo del Área de Fruticultura-Entomología del INTA Famaillá, quien participó de un relevamiento del estado sanitario de las plantas cítricas de traspatio en la provincia.
El trabajo a campo se realizó entre febrero de 2017 y mayo de 2018. Los relevamientos en las rutas consistieron en registrar, cada 8 km la presencia de cítricos, revisar su estado sanitario y entrevistar a los propietarios de cada predio. Las visitas fueron complementadas con una capacitación in situ sobre la problemática, con la entrega de materiales gráficos para identificar los síntomas de la enfermedad, el insecto vector y los hospederos alternativos como la Murraya paniculata.
En cuanto a la presencia de plantas de Murraya paniculata, fue detectada en centros urbanos de Monteros, Simoca y Villa Quinteros; información que fue enviada a las autoridades del SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) para proceder a la erradicación.
El Huanglongbing o HLB es la enfermedad más importante de la citricultura mundial porque ocasiona la muerte de las plantas y no tiene cura. El agente causal es una bacteria floemática Candidatus Liberibacter trasmitida por material vegetal infestada (yemas) e insectos vectores como Diaphorina citri K.
La enfermedad se encuentra presente en gran parte de los países productores de cítricos, donde las primeras detecciones se produjeron en plantas de traspatio. En Argentina, D. citri fue detectado en Entre Ríos en 1984 y, en el 2012, se descubrieron plantas con Candidatus Liberibacter en Misiones. Posteriormente, las intercepciones se incrementaron abarcando otras provincias hasta que, en el año 2017, aparecieron nuevos focos de D. citri y HLB en Chaco, Formosa y Santiago del Estero.