Se aguardan los resultados de las muestras de ADN. El padre del niño, que se encuentra detenido por otra causa, fue quien confesó el crimen; mientras que la madre también ya fue detenida.
La localización se produjo, en la tarde del miércoles, en medio de un operativo de rastrillaje y excavaciones que realizaron en conjunto profesionales del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) del Ministerio Público Fiscal, junto a fuerzas policiales y Bomberos de Bella Vista y Yerba Buena.
Así lo indicó, Miguel Varela, el fiscal que interviene en el caso y titular de la Fiscalía de Homicidio y Graves Atentados contra las Personas del Centro Judicial de Concepción:
“Hemos hallado restos óseos de un cuerpo completo cuya edad sería coincidente a la que tendría el pequeño Benjamín. En una bolsa arpillera encontramos huesos y pelos que hemos recogido para ser enviados al Cuerpo Médico Forense donde serán analizados y sometidos a pruebas de rigor”, sostuvo el fiscal Varela.
El lugar del hallazgo fue en las inmediaciones de una laguna, cercana a la vivienda familiar del menor de 3 años, dónde el pasado martes, personal de la Comisaría Atahona realizó un allanamiento y procedió a la detención de la madre de Benjamín. Además, durante la medida judicial, los efectivos secuestraron dos teléfonos celulares, documentación del menor, prendas de vestir y otros elementos de prueba para la investigación.
Las tareas de rastrillaje, para la cual se dispuso de una retroexcavadora con pala mecánica, fueron guiadas por un arqueólogo del MPF. Además, fue clave la participación de una especialista en búsqueda con perros, dependiente de la división de Bomberos de la Policía. Fue precisamente un can, de los Bomberos, quien alertó y guió a los pesquisas hasta el lugar donde se encontró el cadáver dentro de una bolsa.