Su avión tuvo que desviarse de su trayecto original para evitar los países que no autorizaron su sobrevuelo. El ex presidente de Bolivia será trasladado a un sitio reservado por cuestiones de seguridad.
El expresidente de Bolivia Evo Morales llegó pasadas las 14.10 (hora argentina) a México tras un sinuoso periplo y le agradeció a Andrés López Obrador: “Me salvó la vida”, aseguró.
Morales aterrizó en Ciudad de México con el avión de la Fuerza Aérea enviado por Andrés López Obrador, quien le garantizó asilo político.
Tras las elecciones
“Por el triunfo en la primera vuelta de las elecciones del 20 de octubre empezó el golpe de Estado. Pasaron tres semanas y en la última etapa lamentablemente al golpe político y cívico se sumó la Policia nacional”, sostuvo Evo ante los periodistas que lo esperaban en el aeropuerto.
Luego, continuó: “Para que no haya más hechos de sangre, más enfrentamientos, hemos decidido renunciar. El presidente de México me salvó la vida. Estamos muy agradecidos, hermano canciller, muchas gracias por salvarnos la vida”.
Complicaciones diplomáticas
El viaje tuvo complicaciones diplomáticas de todo tipo. La seguidilla comenzó cuando el avión aterrizó el lunes en Lima, donde tuvo que esperar las autorizaciones correspondientes para seguir su camino a Bolivia a recoger a Morales.
El canciller mexicano Marcelo Ebrard contó que desde Bolivia le negaron el permiso en un un primer momento, por lo que la tripulación tuvo que regresar a Perú.
Espacio aéreo restringido
Destrabado este primer imprevisto, el regreso -con Evo a bordo- también fue complicado. El Gobierno peruano decidió entonces suspender el permiso para bajar en Lima. “Fue muy difícil y muy tenso porque en el aeropuerto donde estaba Evo ya había seguidores y simpatizantes de él alrededor del aeropuerto. Y adentro estaban las Fuerzas Armadas de Bolivia”, dijo Ebrard.
Así, la aeronave hizo escala en Paraguay. Y desde allí partió hacia México, aunque sin poder sobrevolar nuevamente el espacio aéreo de Bolivia ni tampoco el de Ecuador en caso de que tuviera que cargar combustible. Tuvieron que gestionar permisos con Brasil también.
“Hubo que rodear Ecuador porque ya estando en vuelo les dijeron que no les permitían sobrevolar el espacio aéreo y que lo iban a revisar, entonces hubo que rodear y entrar a aguas internacionales”, aseguró Ebrard.
Luego de que Andrés López Obrador dijera sentirse “orgulloso” de encabezar un gobierno que garantice “el derecho de asilo”, Ebrard aseguró que no hay razón para que el asunto “confronte” a los gobiernos de la región, y descartó la posibilidad de que Estados Unidos reclame a México por el otorgamiento del asilo al mandatario.