El ex presidente de Bolivia se reúne este fin de semana con los dirigentes de su partido y diagrama una intensa actividad política, rompiendo las condiciones acordadas cuando se le otorgó el refugio. Hará sede en Salta.
La estrategia de Evo Morales de estar lo más cerca posible al territorio boliviano para conducir la campaña electoral del MAS, por primera vez en 17 años sin él como el candidato presidencial de su partido, avanzó con la decisión del gobierno de Alberto Fernández de darle refugio político desde el jueves 12.
El siguiente paso del expresidente de Bolivia sería instalarse lo más cerca de la frontera argentina-boliviana para facilitar las operaciones y la logística, según deslizaron a Infobae fuentes políticas confiables. La primera versión sobre el tema la dio Wilman Cardoso, el ex candidato a senador por Comunidad Ciudadana y residente de la provincia Gran Chaco, en la frontera con Argentina, quien comunicó a su organización política en La Paz la intención de Morales de instalarse en la localidad de Salvador Mazza, de la provincia Salta. El dato, que se difundió el mismo jueves en el que el expresidente llegó a Buenos Aires, no fue negado ni confirmado por dirigentes del MAS.
En cambio, otras fuentes han adelantado que el lugar donde se instalaría Morales es en una estancia que le alquilarían en la zona norteña de Orán o en el área de Pichanal, al norte de la provincia de Salta.
En las últimas horas también trascendió la versión de que este fin de semana, Morales sostendrá una primera reunión de evaluación y de planificación en Buenos Aires con jefes de las bancadas legislativas del MAS, algunos de los posibles candidatos, altos dirigentes y ex funcionarios que ya han viajado hacia la capital argentina.
Se sabe que en Buenos Aires ya están el ex vicepresidente Alvaro García Linera, la ex ministra de Salud, Gabriela Montaño, el ex canciller Diego Pary y el ex embajador de Bolivia en la OEA, José Alberto Gonzales. Estos dos últimos han sido mencionados también como posibles precandidatos.
Por ahora parecerían tener una mayor ventaja el ex canciller de origen indígena, David Choquehuanca, que fue no solo uno de los colaboradores de Morales con más tiempo en el poder, sino una especie de “guía espiritual” del expresidente. En el tiempo que Choquehuanca estuvo en el gobierno de Morales se habló de la llamada “corriente choquehuanquista” y de que era uno de los posibles sucesores naturales del líder del MAS cuando este no pueda ser candidato. Sin embargo, llamativamente Choquehuanca, de línea moderada en el Gobierno de Morales, perdió abrupta y llamativamente espacios de poder.
En la línea de la renovación, el propio Evo Morales citó varias veces como su posible sucesor al joven dirigente cocalero y ex candidato a senador, Andrónico Rodríguez. Durante la última crisis política en Bolivia, él fue quien lideró las movilizaciones en la zona de Chapare a favor de Evo Morales, en su condición de vicepresidente de las federaciones cocaleras. En las últimas semanas también aparecieron afiches de promoción de su figura como candidato a la presidencia por el MAS y una encuesta preelectoral, difundida por el diario Página Siete, lo coloca en el primer lugar de preferencias, junto a los cívicos Luis Fernando Camacho y Marco Pumari, cada uno con un 16 por ciento. De todas las figuras del masismo que se mencionan como candidatos, Andrónico Rodríguez sería ahora el mejor ubicado en las encuestas.