El delantero de 33 años cuelga los botines tras un último paso por el Apoel de Chipre donde se resintió de una lesión en la rodilla.
Con la Copa Libertadores en alto, Fernando Cavenaghi, el capitán del River campeón, decía que su ciclo en River ya estaba terminado. Más no podía pedir con la camiseta que ama. Ahora, luego de un paso por el Apoel de Chipre y tras sufrir una lesión en su rodilla derecha, el delantero anunció su retiro del fútbol y ya está pensando en cumplir su último sueño dentro de una cancha: el partido despedida en el Monumental junto a los grandes ídolos del club.
El 20 de febrero Cavenaghi jugó su último partido, con la camiseta del Apoel, fue 1-1 ante Aris y metió el gol de su equipo de penal. Después de allí una vieja lesión en el cartílago de su rodilla derecha lo obligó a pasar por el quirófano y frenar su buen paso por el equipo chipriota.
“Quiero expresar mi agradecimiento a todas las personas del Apoel La pasé de maravilla con ellos aquí. Fue una experiencia increíble jugar en este equipo. Hice lo que me gusta: jugar al fútbol y marcar goles. Espero que todos puedan disfrutar como yo disfruté”, expresó Cavegol en el comunicado de despedida del club.
El tiempo estipulado de recuperación para esa lesión podía demandarle hasta ocho meses y, si bien en las últimas semanas surgió el rumor de un posible regreso a River, decidió colgar los botines, a los 33 años.
La carrera de Cavenaghi estuvo marcada por el gol desde su inicio. Debutó con la camiseta de River el 6 de marzo de 2001 ante Guaraní, por la Copa Libertadores y ya gritó un gol. Tenía 18 años daba sus primeros pasos en el Monumental de la mano del Tolo Américo Gallego.
En su primera etapa en River ganó tres campeonatos locales. En 2004 fue transferido al Spartak de Moscú, donde jugó tres temporadas y más de 50 partidos. Luego pasó a Francia y se consagró en el Girondins de Burdeos, donde ganó cinco títulos.
Estuvo a préstamo en el Mallorca de España y en el Inter de Porto Alegre, hasta que en julio de 2011 volvió a River, en el peor momento del club, en la B Nacional.
Cavegol fue uno de los líderes del equipo que regresó a la máxima categoría, jugando con su amigo Alejandro “el Chori” Domínguez en la dupla de ataque. Ya en Primera, las diferencias con el por entonces presidente, Daniel Passarella, lo alejaron de la institución.
Con el pase en su poder llegó al Villarreal de España en agosto de 2012. Y seis meses más tarde recaló en el Pachuca de México. Pero habría revancha para el delantero…
Un año más tarde abrochó su retorno a River, para su tercera y más gloriosa etapa. Gritó campeón del Torneo Final 2014, de la Copa Sudamericana de ese año y de la Recopa Sudamericana y Libertadores en 2015.
Tocó el cielo con las manos. Y empezó a despedirse.
Fuente: Clarín