Lorena Benitez regresó feliz a la localidad de Luis Guillón tras el histórico Mundial de Francia y en casa la esperaban Verónica, con Ezequiel y Renata. “Me volvió el alma al cuerpo cuando vi a mi familia”, dijo la crack argentina.
En dos meses a Lorena Benítez, mediocampista de la Selección Argentina de fútbol femenino en el último Mundial, le cambió la vida por completo. Es que no sólo junto a sus 22 compañeras selló una participación histórica para las representantes de este deporte, sino que, pocos días antes de irse, fue mamá de mellizos.
Lorena tiene 20 años y es una jugadora con gran proyección y reconocimiento dentro del equipo. Además, su historia da cuenta de todos los desafíos extra que deben afrontar las mujeres que se dedican a un deporte históricamente masculino.
Además de jugar en dos clubes (futsal en Kimberley y fútbol 11 en Boca), atiende junto a su pareja un negocio en el Mercado Central. A estas múltiples tareas laborales se le suma, ahora, la maternidad compartida con Verónica Rivero, quien llevó adelante la gestación de Renata y Ezequiel, los mellizos de un mes y medio de vida.
fuente. clarín